Protesta por justicia en el caso de Nasser Picón: La familia exige medidas contra el homicida
En la mañana de hoy, un grupo de personas se congregó frente al poder judicial para exigir justicia por la muerte de Nasser Picón, quien perdió la vida en un trágico accidente vial el 6 de septiembre de este año. La viuda, Yohana Aravena, relató la tragedia y expresó su frustración por la falta de medidas contra el responsable, Bernardo Turcumán, secretario de la cámara de combustible de la provincia de San Juan.
Joana Ravena, esposa de Nasser, lamentó la decisión del juez Daniel Guillem de restituir la licencia de conducir a Turcumán, a pesar de las apelaciones de la familia y la comunidad. El acusado, según los testigos, embistió a Nasser desde atrás mientras se dirigía a trabajar en bicicleta a la fábrica de Taranto. Aunque la jueza Maldonado había suspendido inicialmente la licencia, la última audiencia revocó esa medida, generando indignación entre los allegados de la víctima.
Joana describió a Nasser como una persona joven, deportista, y estudiosa, cuya única intención era cumplir con su deber para mantener a su familia. Pidió que se haga justicia y que Turcumán sea tratado como cualquier otro ciudadano responsable de una tragedia similar. Además, denunció la falta de empatía del acusado, quien no ha expresado remordimiento ni ofrecido disculpas.
En cuanto a la ayuda recibida, mencionó que su familia y la de Nasser están recibiendo apoyo económico, pero destacó la ausencia de apoyo por parte de Turcumán y la empresa Taranto. A pesar de que la empresa inicialmente ayudó con los gastos, la viuda alega que ha habido irregularidades en el manejo del caso por parte de funcionarios judiciales, incluido Francisco Michele Torena.
Ravena apeló a la comunidad a no permitir que casos como este queden impunes y a seguir exigiendo justicia. La familia espera que se revea la decisión de otorgar nuevamente la licencia de conducir a Turcumán y que este sea declarado culpable por sus acciones.