43 muertos y 36 desaparecidos tras el devastador paso del huracán Otis en Acapulco
El huracán Otis ha dejado un rastro de devastación en la ciudad costera de Acapulco, México, con un trágico saldo de 43 personas fallecidas y 36 aún desaparecidas, según informaron las autoridades locales. El puerto turístico, conocido por sus playas paradisíacas y su animada vida nocturna, se encuentra en estado de emergencia después de que el huracán golpeara con una intensidad inesperada.
Evelyn Salgado, gobernadora del estado de Guerrero, confirmó la cifra de víctimas en un mensaje en redes sociales, indicando que 33 de los fallecidos son hombres y 10 mujeres. Esta cifra es considerada preliminar debido a la dificultad para acceder a las áreas afectadas por la falta de servicios de telecomunicaciones y energía eléctrica que colapsaron durante el paso del ciclón. La magnitud de la tragedia ha conmovido a toda la nación, llevando al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a anunciar su traslado a Acapulco para supervisar los esfuerzos de ayuda y recuperación.
El huracán Otis, que alcanzó la categoría 5, la más alta en la escala Saffir-Simpson, ingresó en las primeras horas del miércoles, dejando tras de sí una estela de destrucción en esta ciudad de casi 780,000 habitantes. Comercios y supermercados fueron saqueados por residentes desesperados en busca de alimentos y agua.
La asistencia gubernamental y de organizaciones privadas comenzó a distribuirse el viernes después de la reapertura del aeropuerto de Acapulco y la gradual restauración de la circulación en las carreteras. No obstante, la entrega de ayuda avanza lentamente, y en muchos sectores, los afectados claman por apoyo y se organizan para limpiar y reconstruir sus viviendas y negocios devastados.
Las pérdidas materiales son considerables, con más de 10,000 viviendas dañadas en diferentes grados. Según la consultora especializada en fenómenos naturales, Enki Research, se estima que los daños provocados por el huracán Otis superan los 15,000 millones de dólares.