La pulseada con el fondo
Debemos encabezar las luchas y hacer una campaña de masas para la difusión de nuestro partido, su programa y su posición frente al acuerdo con el FMI. Para eso es fundamental la campaña de 20 mil afiliaciones que ha discutido la dirección provincial y, que se pone como objetivo que el PTP-PCR se convierta en uno de los partidos más importantes de la provincia.
La situación política, económica y social de nuestro país continúa signada por los entretelones de la posibilidad de un acuerdo con el FMI por la deuda de 45.000 millones de dólares contraída por Juntos por el Cambio en 2018. Deuda que distintos especialistas constitucionales la consideran una estafa, otros, los políticos serios la caracterizan de carácter odiosa. Acuerdo que hasta el momento parece estancado y que, a pesar de los incontables gestos de la administración de Alberto Fernández, no ha tenido aun la venia del Fondo para acordar y evitar el default en los próximos meses. Estos gestos, que no son favorables para el pueblo, se materializaron en las medidas económicas del ministro de economía Martin Guzmán.
La decisión de llegar a un acuerdo con el FMI, el gobierno nacional lo fue postergando para después de las elecciones legislativas, sin dejar de pagar cuotas de capital. Quizás en el gobierno nacional especularon con una victoria importante en esas elecciones que le diera solidez a la hora de negociar. La realidad fue que la aplastante derrota sufrida por el Frente de Todos en las legislativas dejó muy debilitado al gobierno de Alberto Fernández para negociar y envalentono a la oposición, sobre todo al Macrismo, para generar una situación de fragilidad institucional con la que pretende acorralar a Alberto Fernández, y que el país quede lo más condicionado posible a la hora de negociar con el organismo financiero.
Curiosamente la derecha macrista responsable de haber endeudado a nuestro país por 57 mil millones de dólares ante el FMI, hoy no carga con el peso de la responsabilidad sobre esta deuda ni paga el costo político de semejante entrega, sometimiento y estafa que carga sobre las espaldas de todos los argentinos. Lamentablemente Alberto Fernández eligió hacerse cargo de esta deuda y negociar un plan de ajuste con el FMI para pagar y evitar el Default.
Este error, al que nos hemos referido largamente en muchas editoriales de Protagonismo Popular, fue señalado también por el gobernador de San Luis Alberto Rodríguez Saa, quien en la reunión del Presidente y el Ministro de economía con los gobernadores planteo: que la deuda debería declararse odiosa y no pagarse, debido a que con ese dinero no se realizó ninguna obra para beneficiar a los argentinos, todo lo contrario se usó para la fuga de capitales y para beneficiar a los bancos, como reconoció el mismo Mauricio Macri.
En la misma sintonía, pero desde el punto de vista legal, se han expresado economistas y constitucionalistas como: Karina Patricio Ferreira Lima, autora de un análisis jurídico internacional que sostiene que el acuerdo de Macri con el FMI debería considerarse nulo por cuanto «violó los propósitos fundamentales del FMI según su Convenio Constitutivo, constituyendo un acto ultra vires». Un acto ultra vires, es aquel acto que se lleva a cabo en representación de una sociedad fuera del objeto social de tal sociedad. (Ver: https://www.ambito.com/politica/fmi/hablo-la-autora-del-analisis-juridico-internacional-que-sostiene-que-el-acuerdo-macri-el-deberia-considerarse-nulo-n5353159).
Por otro lado, Eduardo Barcesat, abogado constitucionalista de Argentina, defensor de los Derechos Humanos aclaró: “… que la deuda externa contraída por el gobierno de Mauricio Macri, especialmente la referida al FMI, se hizo violando el deber de obediencia a la supremacía constitucional, porque debió requerirse el acuerdo previo del Congreso de la Nación Argentina, artículo 76 de la CNA (Ver https://www.youtube.com/watch?v=xfWUbiV7oKM).
En dicha reunión del día 5 de enero con los gobernadores, el presidente Fernández le respondió a Rodríguez Saa que no se podía declarar odiosa e ilegítima esta deuda ya que había sido contraída por un gobierno electo por el voto popular, con lo cual intentó cerrar este debate y dejar esta posición como una posición marginal y carente de peso técnico y jurídico. Para agregar más claridad al asunto tan serio: lo que no dijo Fernández es que se puede considerar ilegítima e ilegal la deuda porque la Constitución Nacional en su artículo 75 inciso 7, faculta al Congreso de la Nación a aprobar la toma de deuda, es decir que para poner límites al poder ejecutivo, la Constitución prevé que cualquier préstamo que nuestro país quiera solicitar se debe realizar con el aval del Congreso, cosa que con el préstamo de 55mil millones con el FMI no sucedió he ahí la ilegalidad de dicho préstamo.
Este es el debate principal que hoy recorre nuestro país y sobre el cual se necesita hacer una gran campaña que desenmascare esta falacia de que no existe otro camino que acordar, esta posición solamente le es funcional a la derecha macrista que ya trabaja para que en el 23 volver al poder de la mano de Rodríguez Larreta.
La pulseada con el fondo va a tener grandes implicancias para el devenir de nuestro país, hoy las negociaciones están estancadas, por un lado por un desacuerdo en la propuesta económica del gobierno argentino, que rechaza el FMI, el que exige más ajuste sobre del déficit fiscal, o sea menos crecimiento, menos salarios, menos ayuda social, etc., pero no solamente están estancadas por esta razón, sino que el principal condicionante parece ser la posición de Estados Unidos con respecto a cuál debe ser el papel que debe jugar Argentina en el Mundo y especialmente en América Latina, en el marco de la disputa que el imperialismo yankee mantiene con el imperialismo chino y ruso.
El avance de China en la región es una gran amenaza para los intereses de EEUU, al que considera su patio trasero, es por eso que para Biden es una oportunidad histórica la negociación con el FMI y como condicionar a nuestro país para que acepte las posiciones anti chinas y limitar su influencia sobre la región. Como dijo el nuevo embajador yankee en Argentina Marc Stanley “a medida que Estados Unidos ve una mayor competencia con China en Argentina y en otros lugares, haré que sea una prioridad, `mantener los pies en el fuego’ (meter presión) especialmente cuando productos como la tecnología 5G están ingresando al mercado y permitiendo que China acceda todos los datos e información de los argentinos”. Estas declaraciones sumadas a otras en las que pidió que Argentina debía encolumnarse detrás de la política de EEUU para intervenir en países como Cuba, Nicaragua o Venezuela grafican que la presión para cerrar el acuerdo con el FMI no es solo económica, sino que tiene que ver con la geopolítica internacional.
Biden sabe que tiene la llave para el acuerdo y, que lograr que Argentina se muestre como un aliado, va a condicionar a los nuevos procesos reformistas que están en curso en la región como el de Boric en Chile, Pedro Castillo en Perú y Arce en Bolivia y también será una barrera de contención ante un posible cambio de mando en Colombia y un posible triunfo de Lula en Brasil.
Esta semana el canciller argentino Santiago Cafiero se reunirá en Washignton con Antony Blinken secretario de estado de Biden. Frente al panorama anteriormente descripto es necesario preguntarnos, qué pretende Cafiero de EE.UU, Va a dar explicaciones de porque Alberto Fernández asumió la presidencia de la CELAC o a explicar el porqué de un posible viaje a China de Fernández para los Juegos de invierno.
En el marco de las negociaciones empantanadas con el FMI no se entiende bien esta estrategia del gobierno de Fernández. A su vez su posible viaje a China donde ya se anuncian que se traería una batería de inversiones como proyectos en trenes de carga, la cuarta central nuclear, represas, parques eólicos, gasoductos y el posible ingreso de Argentina a la ruta de la seda china. Este viaje “forzado”, no se explica sino es por presión de diferentes sectores que componen el FdeT y presionan por una salida al problema del FMI recostados en China, u otro imperialismo, mientras Fernández envía a un hombre de confianza a reunirse con Blinken.
Los tiempos se ponen cada vez más complejos en nuestro país, mientras tanto la inflación que superó en 2021 más del 50% vacía el bolsillo de los trabajadores, el trabajo en negro y el desempleo crecen y la tercera ola de Covid golpea duramente con miles de contagios. Frente a este panorama nuestro partido es vanguardia en la denuncia, para encabezar es necesario poner todos los esfuerzos en denunciar este acuerdo con el FMI que es legitimar una estafa garantizándole la impunidad a Macri, relegar nuestra soberanía nacional y también un brutal ajuste sobre los trabajadores y el pueblo.
Debemos encabezar las luchas y hacer una campaña de masas para la difusión de nuestro partido, su programa y su posición frente al acuerdo con el FMI, para eso es fundamental la campaña de 20 mil afiliaciones que ha discutido la dirección provincial y que se pone como objetivo que el PTP-PCR se convierta en uno de los partidos más importantes de la provincia.
Alberto I. Agüero – Federico Suero