Por una visión democrática de la universidad
El Debate de Fondo en la Universidad
A raíz de la cautelar presentada por la profesora Mónica Morvillo en la Cámara Federal de Mendoza, órgano judicial competente en esta materia, las elecciones en la Universidad Nacional de San Juan previstas para el día 10 de junio fueron suspendidas, lo que provocó una fuerte conmoción en la comunidad universitaria. Inmediatamente el Rector y los candidatos a sucederlo emitieron un mensaje de unidad y salvaguarda de la institución ante este hecho sin precedentes. Este conflicto judicial inesperado a horas de votar abre en su interior un debate de fondo sobre la Universidad Argentina y en particular de la UNSJ.
En la cautelar presentada por Mónica Morvillo, lo que solicita es que se suspenda el proceso electoral porque está convocado sobre la base de una reglamentación que viola la ley de educación superior 24.521, que establece en sus artículos 54 y 55 que para elegir y ser elegidos los docentes deben estar concursados en sus cargos. Esto sucede porque existen docentes interinos, que registran como candidatos en listas de las frustradas elecciones, que han sido ‘regularizados’ por Consejo Superior de la UNSJ en disposiciones pertinentes. Estas reconocen que los docentes de carácter interino que hayan sido regularizados por el mecanismo previsto por el Artículo 73 del Convenio Colectivo de Trabajo gozan de los mismos derechos de ciudadanía que los docentes regulares por concurso. Esto último se realizó a instancias de la Comisión Paritaria de Nivel General de la que participan los gremios, las Universidades y el Ministerio de Educación. Esta comisión emitió una resolución avalando la participación igualitaria de los docentes regulares cualquiera sea la forma en que efectivizaron sus cargos. Si la justicia hace lugar a esta cautelar, para realizar las elecciones, las listas de candidatos no podrán llevar en su nómina postulantes que hayan accedido a la regularizad por artículo 73, estos tampoco podrán votar representantes a los consejos, pero si a Rector y Decanos. Si llegado el caso la Universidad no compartiera este criterio debería apelar el fallo postergando la realización de las elecciones para fecha incierta. Si la justicia no hace lugar a la cautelar en pocos días se podría elegir a las nuevas autoridades universitarias.
Hay múltiples argumentos a favor y en contra de las posiciones en pugna. El Convenio Colectivo de Trabajo tiene jerarquía de ley al igual que la Ley de Educación Superior, con lo que evidentemente hay una colisión normativa y definir cual tiene supremacía parece ser una instancia a resolver en la Corte Suprema de Justicia. Algunos juristas sostienen que la Ley de Educación Superior debe ser interpretada en un devenir histórico, donde el Convenio Colectivo de Trabajo actúa como atemperante. Otros sostienen que la Constitución Nacional consagra los derechos a elegir y ser elegidos, como así también los que establece la Corte Interamericana de Derechos Humanos y estos deben ser preceptos que se imponen en esta disyuntiva.
Lo que se juega en este debate es la subsistencia de un modelo anacrónico de Universidad con direcciones elitistas producto de sectores enquistados en el poder que no toleran la apertura democrática. La voz de Mónica Morvillo si bien solitaria, es el eco de un sector minoritario que resiste los cambios. Los docentes que podrían ser electos y a su vez elegir los miembros de los consejos equivalen a menos del 20% de casi 3.500 docentes. Hemos llegado a esta situación por varios motivos, principalmente porque el mecanismo de concurso ha sido utilizado discrecionalmente por las autoridades para regularizar a los docentes cercanos y por el mismo motivo se les ha negado a los opositores. También se debe a que los cargos del personal que se jubila no han sido llamados a concurso para su cobertura, sino que han sido utilizados para formar cargos de menor jerarquía y cubrir la creciente demanda de personal docente en nuevas cátedras y carreras.
El Convenio Colectivo de Trabajo del personal docente es una victoria muy importante en la lucha democrática en la universidad. Los efectos en los derechos laborales que este ha producido no son discutidos por nadie, pero si se discute los derechos de ciudadanía que este convenio supone. En esta avanzada democrática ha jugado un rol muy importante ADICUS que entendió el espíritu aperturista de este convenio mas allá de consagrar derechos laborales y encabezó el movimiento de nueva democracia en la Universidad. No es una contienda que se haya resuelto y quedan nuevos desafíos, tal vez los avances conquistados no alcancen para abrir los padrones en estas elecciones, pero sin dudas el proceso abierto por el artículo 73 terminará por cambiar la fisonomía de la Universidad Nacional de San Juan en un sentido amplio, participativo y democrático.
La integración a los órganos de gobierno de este contingente de docentes trae aparejado una nueva visión de la universidad, una nueva forma del debate y una multiplicidad de miradas acerca del rol que debe cumplir la educación superior en la sociedad. Garantizar que este sector se exprese podrá dinamizar la institución brindándole nuevas energías y un apego renovado a los intereses de la sociedad.
Lic. Emilio Furlán