Ni Una Menos: Cada 31 horas una mujer es asesinada por el hecho de ser mujer
A seis años de la primera movilización del colectivo » Ni Una Menos», Argentina continúa arrojando cifras alarmantes en materia de violencia de género: cada 31 horas una mujer es asesinada por el hecho de ser mujer.
Así lo apunta el último relevamiento realizado por el Observatorio de las Violencias de Género “Ahora Que Sí Nos Ven”.
«Según lo relevado de medios gráficos y digitales de todo el país, hemos registrado 1717 víctimas de femicidios desde el 3 de junio de 2015 al 29 de mayo de 2021. Cada 31 horas una mujer es asesinada por el hecho de ser mujer«, advierte el monitoreo de alcance nacional.
La publicación forma parte de la campaña de concientización que impulsa el colectivo por el #3J al cumplirse un nuevo aniversario de la primera marcha multitudinaria que tuvo su epicentro en las inmediaciones del Congreso de la Nación. Bajo protocolo por pandemia de Covid, en esta oportunidad se insta a intervenir las redes sociales y espacios fìsicos a través de un «Cartelazo».
«Tal como venimos señalando en estos años, el lugar más peligroso para las personas que viven violencia machista es su hogar. En estos 6 años el 64% de los femicidios fue cometido en la vivienda de la víctima, un porcentaje que se mantiene año a año», amplía el informe.
Otras de las aristas que se desprenden del monitoreo, refiere al vínculo de la víctima con el agresor: el 64% de los femicidios fue cometido por la pareja o ex pareja de la víctima, y cerca del 90% de los femicidios fue perpetrado por un integrante del círculo íntimo (parejas, ex parejas, familiares y conocidos).
«Es importante analizar estos dos datos de forma conjunta, ya que nos ayudan a derrumbar la creencia histórica que afirma que las mujeres estamos más expuestas a ser atacadas en la calle, a oscuras y por una persona, un «monstruo», alguien que desconocemos. Por el contrario, el espacio que el patriarcado nos impuso, el privado-el hogar, es donde más violencia sufrimos, a manos de alguien que dice querernos, que no está loco, sino que lleva al extremo las desigualdades de género de esta cultura machista», señala el análisis.
FUENTE: BAE Negocios