Lo siento, no hay encuestas disponibles en este momento.

Brasil registra por primera vez más de 4.000 muertos por la covid-19 en 24 horas

Otro récord funesto. Brasil registró este martes por primera vez más de 4.000 muertos de covid-19 en 24 horas, según los datos del Ministerio de Salud. Por un lado, es el resultado de la retención de datos del fin de semana y el feriado de Semana Santa, días en los que los laboratorios de diagnóstico hicieron menos análisis. Por otro, los especialistas presagian un mes de abril con tasas de mortalidad aún más elevadas.

“Podemos esperar un mes muy triste, muy trágico para Brasil. La tasa de transmisión sigue siendo altísima y la tasa de vacunación aún está por debajo de lo deseable”, explica la doctora Margareth Dalcolmo, investigadora de la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz) y una de las neumólogas más experimentadas del país. Brasil, de 212 millones de habitantes, contabilizó 4.195 muertos, con lo cual el total se eleva a 336.947 en más de 13 meses de pandemia. Este martes se contabilizaron además 86.979 nuevos contagios, llevando la cifra total a 13,1 millones.

En un boletín difundido este martes por el Observatorio Covid-19 de la Fundación Fiocruz, la institución advierte de que “la pandemia puede permanecer en niveles críticos durante todo el mes de abril, prolongando la crisis de salud y colapso de los servicios y sistemas de salud en los Estados y capitales brasileñas”.

Hubo, además, un aumento adicional en la tasa de letalidad, del 3,3 al 4,2%. Este indicador rondaba el 2,0% a finales de 2020. Los investigadores creen que este crecimiento puede ser consecuencia de la “falta de capacidad para diagnosticar, de manera correcta y oportuna, los casos graves, sumada a la sobrecarga de los hospitales”.

Ya se esperaba un nuevo récord desde el inicio de la jornada, ya que São Paulo, el Estado más poblado y rico de Brasil, también registró su mayor número de muertes desde el inicio de la pandemia: 1.389 en las últimas 24 horas. Sin embargo, el doctor João Gabbardo, coordinador del Centro de Contingencias covid-19, afirmó que la “aceleración de los ingresos en UCI se ha vuelto negativa”, lo que “significa que el número de nuevos ingresos es menor que el número de egresos” y la presión sobre el sistema de salud comienza a relajarse. Pese a eso, el experto advirtió que todos los cuidados son sumamente importantes en los próximos días. Las tasas de ocupación de camas de UCI siguen siendo muy altas y superan el 89% tanto en la capital paulista como en todo el Estado.

Para el neurocientífico Miguel Nicolelis, las cifras publicadas este martes están en línea con una alerta lanzada el viernes pasado por investigadores brasileños de la Universidad de Washington, Estados Unidos. “En el mejor de los escenarios, en julio Brasil puede llegar a medio millón de muertes. En el peor de los casos, 600.000 muertos”, explica el especialista. También dice que, en algunos lugares, el número de muertes ya es mayor que el de nacimientos. En el caso de Río Grande Sul, datos preliminares de marzo indican que hubo 4.000 muertes más, destaca. “Es posible que en abril, las muertes superen a los nacimientos en todo el país. Toda la región del sur de Brasil ya está empatada”, agrega.

Para Margareth Dalcolmo, el trágico escenario en el que se encuentra Brasil solo podrá superarse si el país promueve una cuarentena de al menos dos semanas al mismo tiempo que la campaña de vacunación cobra un nuevo ritmo y se acelera. “Necesitamos vacunar a mucha gente y muy rápidamente, para que realmente podamos interferir en esta transmisión. No tiene sentido esperar hasta fin de año para llegar al 70% de la población brasileña vacunada. Y es inútil decir que basta con vacunar a 70 millones de personas”, dice. “Tenemos que vacunar a 150 millones de personas en Brasil para que podamos tener una inmunidad comunitaria adecuada. Y tenemos que hacer esto hasta el final del semestre”, argumenta.

Dalcolmo recuerda que el Sistema Único de Salud (SUS) tiene capacidad para vacunar a dos millones de personas más al día. Hasta ahora, no se ha llegado al primer millón. Se prevé que en abril los Estados comenzarán a vacunar a la población de 60 años. Hasta la fecha, poco más de 20 millones de brasileños han recibido la primera dosis de la vacuna. En otras palabras, alrededor del 10% de la población, muy por detrás de países como Estados Unidos, Chile, Reino Unido o Israel. “El ritmo es muy lento. Es inaceptable que los puestos de salud hayan cerrado los días festivos. Deberían estar vacunando sin parar”, argumenta.