Cómo funciona la Comisión Evaluadora de Salud, la encargada de aprobar los protocolos
El armado y la realización de los distintos protocolos es una de las tareas esenciales que, por el momento, realizan desde la División Atención Primaria de la Salud en conjunto con otras dependencias de la cartera sanitaria provincial.
Son un grupo de 6 a 8 profesionales que definen las normativas y reglamentaciones sanitarias indispensables que deben tener en cuenta las distintas actividades para evitar contagios, tras la habilitación que hace el Gobierno provincial en cada fase de la etapa Covid-19.
El Comité evaluador está conformado por médicos infectólogos, médicos de familia, licenciados en Higiene y Seguridad, enfermeros especialistas en control de infecciones, trabajadora social, profesores de educación Física y jefes de zonas sanitarias, entre otros.
La coordinadora de la comisión es la doctora Gabriela Gutiérrez, jefa de Atención Primaria de la Salud que explicó los pasos a seguir en cada caso para crear los distintos protocolos que rigen, en estos tiempos de pandemia, el proceder en público de cada ciudadano.
“Tenemos una página disponible para la recepción del documento normativo. Luego lo evaluamos, respondemos en cada caso lo que creemos necesario incorporar, hacemos observaciones y luego devolvemos el protocolo a quienes los presentaron”, explicó la funcionaria. “Una vez incorporados todos los detalles técnicos sugeridos, la institución actuante presenta el instructivo por mesa de entrada para que comience el recorrido administrativo oficial y pueda darse la norma legal”, sostuvo.
Se han recibido para el estudio, hasta el momento, unos 500 protocolos de variados organismos como obras sociales, colegios, laboratorios, comercios en general, toda actividad que es habilitada para cumplir su tarea por el Poder Ejecutivo Provincial. De la cantidad presentada, ya fueron aprobados 390 instrumentos administrativos.
Si bien queda claro que los instructivos llevan implícito las normativas o requisitos que deben cumplir en cada rubro, hay necesidades comunes a todos como la higiene respiratoria, distanciamiento social, uso del barbijo, limpieza de las superficies y recolección adecuada de residuos. Se destaca, además, que se tiene en cuenta para las recomendaciones finales los espacios de los locales, la infraestructura, la cantidad de personal y al tipo de material que se usa para trabajar.
Con la normativa aprobada, se espera que el Gobierno habilite cada actividad, para que el protocolo sea oficial y se haga público a través de la página del SI San Juan.