En San Juan hay 27 laboratorios en centros de salud que realizan el análisis de hepatitis virales
El Día de Mundial contra la Hepatitis se conmemora cada 28 de julio y tiene por objetivo la concientización, capacitación, promoción y educación a los equipos médicos y a la comunidad.
Para llevar más información estuvieron en conferencia de prensa, la jefa del Programa Provincial de SIDA, ITS Y Hepatitis Virales, Victoria Sain, la médica de la sección de Gastroenterología y Endoscopía Digestiva del Servicio de Clínica Médica del Hospital Rawson, María del Valle Aubone y el médico del Servicio de Gastroenterología del Hospital Marcial Quiroga, Sergio Montañez.
Los especialistas y sus equipos desarrollan una tarea en conjunto entre el Área Central, los hospitales Rawson y Marcial Quiroga, y los centros de salud.
En San Juan, en todos los centros de salud con laboratorio de los 19 departamentos, son 27 centros de salud con laboratorio en los que la persona puede acercarse a realizar el análisis de hepatitis virales.
Sain explicó que “con respecto a la prevención y detección se está trabajando sobre la microeliminación de las hepatitis, lo que quiere decir que desglosamos a la población en general en subgrupos: en el penal se trabaja de un modo particular, con las personas que donan sangre de otro modo, con la población en general de otro modo, con otros mensajes, para tratar de detectar esa gran mayoría de las personas que viven con el virus y lo desconocen”.
“Se estima que el 50% de las personas que tienen hepatitis, lo desconocen por lo que recomendamos que las personas se acerquen al menos una vez en la vida para hacerse el análisis”, dijo.
“En San Juan de 2013 a 2019 se detectaron 258 personas con hepatitis virales, 45 personas con hepatitis B y el resto con hepatitis C, pero en realidad es un subregistro porque esto es en base a la fichas epidemiológicas de notificación obligatoria, que no siempre los médicos la realizan. Se está trabajando en mejorar esta estadística que es lo que nos permite dar un perfil epidemiológico. Con respecto a la hepatitis C, hasta el año pasado hemos entregado 52 tratamientos, la gran mayoría respondiendo con la cura”.
Por su parte Aubone señaló que “existen mitos urbanos, las personas creen que las enfermedades hepáticas o del hígado causan muchos síntomas y la verdad es que 8 de cada 10 pacientes no tienen síntomas, y de hecho pueden tener hasta un laboratorio normal. Por eso el mensaje más importante es que todos deben realizarse al menos una vez en la vida el test de hepatitis B y hepatitis C, es importante pedírselo al médico para que lo solicite”.
Son anticuerpos que se detectan fácilmente a través de una extracción y después hay pruebas confirmatorias que serían las cargas virales. Esto en la provincia se realiza sin ningún tipo de problemas, permite el diagnóstico precoz, el tratamiento oportuno y el objetivo es evitar la producción sobre todo de la hepatitis B y hepatitis C a cirrosis y a cáncer de hígado.
Los pacientes tienen que tener en cuenta que tienen acceso a los estudios serológicos, que tienen que pedírselo a los médicos y que tanto la hepatitis A como la B, tienen forma de prevención que son las vacunas.
En la oportunidad, Montañéz dijo: “Con los pacientes que tienen hepatitis nuestros especialistas tienen que valorar el grado de compromiso que tiene su hígado. De hecho muchos de ellos son asintomáticos, no obstante ello, la enfermedad sigue adelante”.
“Es ahí donde nosotros tenemos que hacer hincapié en el diagnóstico precoz y la prevención de estas complicaciones, que son la cirrosis y el cáncer de hígado”.
“Existen muchos métodos para seguir a estos pacientes, a los pacientes con una enfermedad totalmente asintomática uno le puede hacer controles anuales o semestrales, dependiendo del grado de compromiso que tenga su hígado. O solamente hacer una ecografía cada seis meses a un paciente con cirrosis, con ello estamos haciendo prevención del cáncer de hígado. Además, es importante hacer controles anuales dependiendo del estadio de la enfermedad. Esto es tanto para la hepatitis B como para la hepatitis C”, agregó.
“La idea es evitar las complicaciones, en el caso de los especialistas que nos dedicamos a la parte patológica, cuando está en un estadio muy avanzado, son cuadros muy delicados para la vida del paciente, con una pésima calidad de vida”, finalizó.