Cristina Kirchner se defendió: qué dijo al declarar en Comodoro Py
La vicepresidenta electa Cristina Fernández sostuvo hoy que la acusación por la obra pública en Santa Cruz «fue un plan ideado por el gobierno saliente» con una «vicepresidenta que está sentada en el banquillo de los acusados acusada de ser la jefa de la banda», al prestar declaración indagatoria ante el Tribunal Oral Federal 2.
“Este gobierno llegó con el auxilio invalorable del aparato judicial», aseguró e insistió con que esta causa de obra pública es el caso paradigmático del lawfare».
«Tengo una suerte cuando sortean los jueces, siempre me tocan Bonadio o Ercolini», se quejó Cristina.
«El gobierno que se va tenía una mesa judicial que decidía quién iba preso, quién no, a qué empresario había que apretar para que no vaya preso, para que venda sus empresas», denunció.
Después, cargó contra Martín Irurzun, el titular de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado ( Dajudeco), más conocida como la oficina de las escuchas. «Irurzun te escucha e Irurzun te mete preso. Esa sería la fórmula de Comodoro Py», dijo sobre el camaristas federal que firmó los fallos más severos contra los ex funcionarios kirchneristas detenidos con prisión preventiva.
«Soy jefa de cuatro asociaciones ilícitas. No sé cómo tuve tiempo para gobernar este país», dijo la ex presidenta al cuestionar la «multiplicidad de procesamientos», y consideró que el juicio «está montado sobre la hipótesis de que Néstor Kirchner fue presidente para armar una asociación ilícita con un empresario de la construcción de Río Gallegos» para «saquear las arcas del Estado».
«Se la pasaron buscando el dinero K».
Después, cuestionó la decisión de no transmitir en vivo su declaración, rechazada más temprano por los jueces tras un nuevo planteo de la defensa de la senadora. «¿No les parece que tiene impacto que la vicepresidenta electa este sentada en el banquillo acusada de ser la jefa de la banda, no les parece que interesa a la opinión pública?», dijo. Y respondió: «Yo creo que sí».
«Se difundieron y se escuchó en vivo y en directo conversaciones privadas de una ex presidenta, yo, con un ex secretario y hay programas de televisión que anunciaron cual circo ‘las conversaciones de Cristina y Parrilli’ sin que a ninguno de esta casa se les mueva un pelo», expresó la senadora en su indagatoria.
«Esas conversaciones dependen de ustedes, los jueces de Comodoro Py», dijo ante el tribunal y se preguntó: «si esto no es lawfare qué es. ¿Eso es garantías? ¿Eso no es persecución? Y qué hablar de la persecución a mis hijos», lamentó.
La ex presidenta está procesada como supuesta jefa de una asociación ilícita en esta causa en la que es juzgada junto al empresario detenido Lázaro Báez, a cuyas empresas, según la acusación, se habría direccionado el 80 por ciento de la obra pública en Santa Cruz durante el kirchnerismo.
En otro tramo de su declaración, la vicepresidenta electa cuestionó el rol de la Oficina Anticorrupción, la Unidad de Información Financiera (UIF) y la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), de los cuales los dos primeros ejercen la acusación en la causa por presunto fraude en la obra pública.
Señaló que la titular de la Oficina Anticorrupción Laura Alonso es «no abogada» y que el titular de la UIF Mariano Federici está vinculado al banco HSBC, entidad que fue investigada –según dijo- por lavado de dinero y debió pagar una multa de 13 millones de dólares por violación a normas regulatorias.
Además, criticó el rol de la AFI y recordó que en un juzgado federal de Dolores se ventilaba que los testigos eran «guionados», haciendo referencia al mediático Leonardo Fariña, hecho por el cual se lo atribuyó al ministro de Justicia Germán Garavano.
El traspaso de mando en 2015
Cristina Kirchner aseguró que fue la Justicia a través de un fallo, en 2015, quien le impidió entregar el mando a su sucesor Mauricio Macri porque determinó que su mandato había finalizado el 9 de diciembre a las 24:00 de ese día.
«No me dejaron, yo quería ir a la asamblea y un magistrado dijo que yo no podía».
«Tuvimos un presidente provisional, no votado, el entonces senador Federico Pinedo», dijo Cristina Kirchner en función de un fallo de ese momento dictado por la jueza federal con competencia electoral María Servini de Cubría.
«Fui también presidenta de la república, la primera mujer. Sin embargo, a solicitud del Gobierno entrante, mi mandato terminó el 9 de diciembre a las 12 de la noche cual Cenicienta, así terminó el mandato de las dos veces presidenta electa de los argentinos», lamentó.
«Cuando terminará el mandato del presidente Macri, ¿Lo harán terminar a las 12 de la noche del 9 de diciembre?, se preguntó. Además, criticó que luego de ello «quedó la leyenda» y los medios dijeron que «no quería ir a la asamblea».
FUENTE: FILO NEWS