34º Encuentro Nacional de Mujeres en La Plata
A pesar de la terrible tormenta que se ensañó con las mujeres que llegaron a reunirse a la ciudad capital de la provincia, a pesar de que hubo barrios, escuelas, campings inundados, a pesar de los cortes de luz, el 34 Encuentro Nacional de Mujeres (ENM) empezó en La Plata. No hay números todavía que den cuenta del fenómeno pero las calles fueron testigos de la presencia colorida, política, ruidosa y pujante de los feminismos del país y de América Latina haciendo lo que mejor saben hacer, poniendo el cuerpo y la cabeza para cambiar las ideas y las prácticas, y para que el mundo sea cada vez más verde y violeta.
A las ocho y media, alguien dijo que era todo obra del patriarcado. El cielo se caía sobre La Plata y había que poner un poco de humor a una mañana destemplada y lluviosa. La tormenta que se instaló en la ciudad desde la madrugada impidió que se hiciera el acto de apertura del ENM, que estaba previsto en la esplanada del Estadio Único. Allí fueron llegando algunos grupos de mujeres enfundadas en capas, impermeables, paraguas que se daban vuelta por las ráfagas de viento, botas de lluvia y muchas ganas de encontrarse.
La campaña #SomosPlurinacionales improvisó un acto desde un camión sobre la calle 25, haciendo hincapié en la necesidad de cambiar el nombre del Encuentro porque “nuestros encuentros ya son diversos, ya son plurinacionales” y planteando que “hoy vinimos a cambiar la historia porque lo que no se nombra no existe y lo que no existe no tiene derechos”. “Plurinacional y con las disidencias”, coreaban desde abajo apechugándole al agua y al frío. Aparecieron allí reclamos que se harán presente durante los tres días de Encuentro: la lucha por el aborto, legal, seguro y gratuito y por la educación sexual integral en todo el sistema educativo, la separación de la iglesia del Estado y contra el ajuste, entre otros. Lolita Chávez, de los pueblos originarios, tomó la palabra: “Con todo nuestro amor hemos venido, llamamos a nuestras ancestras, vengan pues, acompáñenos, aquí estamos vivas a pesar de los genocidios, a pesar de los feminicidios, vivas estamos porque estuvieron ustedes”. También hubo compañeras de Honduras que denunciaron el asesinato de la líder indígena y feminista Berta Cáseres por el que todavía no se hizo justicia. “Berta no murió, se multiplicó”, gritaron las presentes. Desde la #CampañaSomosPlurinacional, llamaron a que el debate y la discusión sobre el cambio de nombre se den en el acto de cierre del Encuentro, el lunes por la mañana. Para la comisión organizadora del ENM el debate debería darse durante los talleres que empezaron hoy por la tarde con cierta demora, porque la cantidad de delegaciones que fue llegando con cierto retraso debido a la tormenta.
Desde allí, Patricia Colombres, de la Comisión organizadora reprochó a las autoridades provinciales y municipales que no respondieran a los problemas surgidos por las inundaciones en una ciudad con una historia al respecto. “Para los vallados policiales y para poner las fuerzas de seguridad en la calle, la gobernación se organizó. Ahora para prevenir y hacerse cargo de la inundación no”, apuntó en dialogo con Página/12. Como base de este movimiento heterogéneo que se dio cita este fin de semana, y más allá de las experiencias de cada una -que como enseñó el feminismo siempre son políticas- se denunciaron en este ENM las políticas de ajuste del gobierno nacional y provincial. “Las consecuencias de esas políticas sobre nuestras vidas se expresan en la feminización de la pobreza, en niñas madres, en la violencia machista cotidiana y acrecentada día a día, en las muertes por abortos clandestinos, en los feminicidios, los travesticidios y los transfemicidios como realidad abrumadora y permanente, en la falta de respuestas por parte de un Estado ausente que no se responsabiliza pero sí se hace presente para reprimir y criminalizar”, planteó la comisión organizadora en el texto que tenía previsto leer en el acto de apertura y por la tarde circuló por las redes.
Mientras, en la zona de los Bosques de La Plata, donde se concentraban gran parte de los talleres, el clima encuentrero desbordaba.
Llegando a las Facultades de Psicología y Humanidades la cola de mujeres y disidencias para entrar tenía varias cuadras. Había tanta gente en los parques internos como adentro de los talleres. No solo las aulas sino todos los rincones estaban colapsados. Muchas quedaron afuera. Como Eugenia Balbi, militante de Seamos Libres de Mar del Plata con mucho glitter y brillo en los ojos. “Vinimos con muchas chicas de 18 años que recién empiezan, para que aprendan qué es el feminismo”, contó. Eva Sánchez, de 65 años, también era la primera vez que se animaba a un Encuentro. Llegó acompañada de otra debutante, su prima Karina, de Neuquén. ¿Por qué empezar ahora? “Porque me fui sintiendo más identificada con los reclamos y también para descubrir cosas que una tiene en el interior y no conocía”, contó Eva. Quería participar de los talleres de Mujer y familia y de Relaciones afectivas pero no pudo, también quedó afuera, como tantas otras, haciendo su propio encuentro en los alrededores.
A pesar de la lluvia que fue y vino durante todo el día, muchas se animaron incluso a sentarse en el parque. Unido bajo la tierra húmeda, un grupo cada vez más numeroso habló sobre Bisexualidad y pansexualidad durante toda la tarde.
En el hall de la Facultad de Psicología dos mujeres del Fondo de Lucha de Kimberly Klark buscaban hacer visible que hace 17 días que la fábrica ubicada en Bernal despidió a 209 trabajadores y trabajadoras. Afuera alguien vendía tartas calentitas a 50 pesos, “sin huevos, con ovarios”. Otra vez el humor, como a lo largo del día en cada grupo de compañeras y cómplices. Más allá uno de los edificios de la Facultad de Humanidades lucía un cartel enorme: “Será ley”.
En las escaleras, las ventanas, los pasillos, en el piso y en los bares, grupos de mujeres charlando, tomando mate, compartiendo este tiempo de estar solas, de estar juntas, de hablar de lo que nos atraviesa para ponerlo en palabras y, por qué no, en acto.
A las seis de la tarde, la lluvia dio una tregua y la Campaña por el Aborto Legal Seguro y Gratuito pudo convocar a un pañuelazo en el centro, que llenó varias cuadras de la calle 7. En otro punto de la ciudad, comenzaba un rato más tarde la Marcha contra los Travesticidios. También se daban lugar muchas actividades culturales en distintos puntos de la ciudad, porque esto recién empieza y, como si hiciera falta recordarlo, no hay lluvia ni truenos que puedan contra la marea verde y violeta que nos une y potencia.
¿Qué es el Encuentro Nacional de las Mujeres?
El Encuentro Nacional de Mujeres se realiza hace 34 años pero suena y resuena cada vez más fuerte en los medios de comunicación de todo el mundo. Así como el movimiento feminista crece a pasos agigantados en todo el mundo, esta cumbre de mujeres se expande año a año.
¿Pero qué es exactamente el Encuentro Nacional de Mujeres? Para entender un poco más, FILO dialogó con Florencia Rubilar, una de las organizadoras del encuentro.
«Es un espacio en el cual nos autoconvocamos como mujeres y las que nos percibimos como mujeres, lesbianas y trans para debatir nuestras problemáticas que nos atraviesan que pensamos que son individuales pero en realidad son de todas. Es un espacio en donde hay múltiples maneras de pensar y construir pero que igual nos unimos con el único objetivo de eliminar la violencia machista, de buscar una sociedad más justa y transformar al mundo», define Florencia.
El Encuentro nació en el año 1985 en la III Conferencia Mundial de Nairobi. A partir de ahí, miles de mujeres de todos los rincones se fueron sumando a lo que hoy es una cumbre llena de colores, banderas, dolores, alegrías y protestas por los derechos humanos. «Este el espacio que hace más de tres décadas, empuja, da fuerza y valentía a todas las mujeres para seguir transformando a través de políticas públicas esta humanidad«, finaliza la organizadora.
Durante el día sábado se realizan los talleres, este año hay más de setenta, que abordan distintas temáticas que influyen en la vida cotidiana de todas. El domingo habrá un multitudinario pañuelazo a favor del aborto legal, distintas actividades culturales y la típica marcha de cierre que será histórica.