Trump provoca a la Reserva Federal en la víspera del esperado recorte
El presidente de EE UU, Donald Trump, está convencido de que la Reserva Federal probará este miércoles que estaba en lo correcto cuando critica al banco central estadounidense por haber llevado el alza de los tipos de interés “demasiado lejos”. La autoridad monetaria de Estados Unidos tiene previsto recortar el precio del dinero en al menos un cuarto de punto tras la reunión de dos días que comenzó este martes. Pero el presidente quiere ver una rebaja aún mayor. La Fed, insiste, “se equivoca bastante”.
Los tipos de interés están desde diciembre en una banda entre el 2,25% y el 2,5%. Será previsiblemente el primer recorte desde la crisis financiera, cuando se dejaron virtualmente en el 0%. Trump empezó a cargar contra la Fed el pasado verano. “Estoy muy decepcionado”, comentó cuando la primera jornada de la reunión acababa de comenzar, “al final se va a probar que estaba en lo cierto”.
El proceso de normalización de la política monetaria en EE UU se inició a final de 2015 con Janet Yellen al frente de la Fed. Este domingo, en una intervención pública, su antigua presidenta se declaró favorable a un pequeño recorte de un cuarto de punto. Citó la incertidumbre creada por el litigio arancelario con China, la moderación del crecimiento y la baja inflación. Era la bendición que necesitaba su sucesor, Jerome Powell.
“La economía va fenomenalmente bien”, asegura Trump, “lo haría mejor incluso si la Fed no hubiera subido los tipos tan pronto ni tanto”. El presidente dice incluso que el producto interior bruto estaría avanzando a un ritmo del 4%, su gran promesa electoral, en lugar de cerca del 3% que se registró en 2018. El índice Dow Jones, añade, estaría también “10.000 puntos más alto”. “Fue un gran error”, reitera al cuestionar a Powell.
Además de un abaratamiento en el precio del dinero, el plan de la Fed es suspender la reducción del balance en septiembre. Trump provoca así a Powell para llevarlo a su terrero mientras los últimos indicadores muestran que la economía se comporta mejor de lo que se esperaba en la reunión de junio, cuando se abrió por completo la puerta a la rebaja de tipos, y cuestionan si el recorte está realmente justificado.
Los miembros de la Fed favorables al recorte explican que se hace de forma preventiva y esperan que se dé así también un impulso a la inflación, que está varias décimas por debajo del nivel de referencia del 2%. Hay cinco miembros del comité que en sus intervenciones públicas más recientes se mostraron sin embargo contrarios a dar este paso atrás porque entienden que es desperdiciar munición para cuando el riesgo de recesión sea real.
Está por ver, por tanto, cuál será la intensidad de la rebaja que se decida, si bien el lenguaje que se utiliza anticipa nuevos recortes. La última encuesta interna indicaba como posible al menos dos ajustes a la baja de un cuarto de punto. La Fed insiste en que modula su estrategia según los datos disponibles. Además de la presión de los mercados y del presidente, tiene la de los bancos centrales europeo y el japonés con estrategias opuestas.
(Fuente: El País)