Jaguares con la cabeza en el juego
Cuando le preguntaron si iba a poner titulares, Gonzalo Quesada se salió de su libreto de entrenador sobrio y analítico. Como pocas veces, se permitió una humorada: «Si meto a los mismos 23, no entendemos nada». Esta respuesta del head coach esconde una de las claves principales por las que Jaguares cerrará la temporada como campeón de la Conferencia Sudafricana y, si derrota a Sunwolves, en el segundo lugar de la tabla general. Y la clave es la rotación.
El exPuma pone como punto de partida el partido contra Brumbies a fines de abril, momento en el que el equipo debió encarar una serie de ocho partidos consecutivos que finalizarán el viernes con Sunwolves. Hizo apenas dos y tres modificaciones ante los australianos y Stormers, pero fue a partir de la gira por Australia y Nueva Zelanda cuando Quesada rotó como nunca antes el XV titular: nueve cambios ante Highlanders respecto al equipo que paró la semana anterior, seis con Hurricanes, ocho ante Waratahs, nueve frente a Reds y otros nueve en el reciente triunfo ante Sharks. El saldo es inmejorable: seis victorias en 7 partidos.
«Era necesario. Empezaba una seguidilla de ocho partidos seguidos y haber rotado poco nos hubiera tenido clasificados, pero sin las energías suficientes para el sprint final», le dijo Quesada a LA NACION. Si el Coco Basile tenía su «11 de memoria» que lo llevó a ganar varios títulos con Boca, Quesada desafía esa lógica.
Si hay algo que el entrenador disfruta de su rol es lo que él definió como management, la gestión de grupo. «Es fundamental el compromiso que tomamos con los jugadores para que todos tengan oportunidades y sumen confianza. Esto le dio la chance a muchos de mostrar su nivel y a otros, que por ahí se podían sentir titulares, que comprendan que no se pueden relajar. Hay una buena competencia que genera que ningún jugador esté saturado», detalló.
Quesada alineó 39 jugadores durante su ciclo. Contando a Francisco Gorrisen, que ayer tuvo sus primeros minutos, ya son nueve los que debutaron esta temporada en la franquicia: Tomás Cubelli, Rodrigo Bruni, Mayco Vivas, Domingo Miotti, Julián Baldunciel, Lucas Paulos, Santiago Carreras, Lucio Sordoni y Gorrisen. Un dato que puertas adentro se habrá festejado igual que una victoria: ante Reds, los 23 convocados pasaron por los Pumitas. Eso quiere decir que hace tiempo están bajo la órbita del sistema de alto rendimiento de la Unión Argentina de Rugby.
Una de las obsesiones del entrenador cuando asumió era generar un plantel más amplio y rico en variantes. «Si fuera por mí usaría más jugadores, pero hay una lista SANZAAR que dimos cuando arrancó el año y no podemos llamar a cualquiera. Cuando comparamos a los jugadores internacionales que hay en Jaguares, es decir los que juegan en los Pumas, con los colegas de puestos de los otros seleccionados, estamos mucho mejor. Ese era uno de los objetivos», explicó.
La rotación toma mayor relevancia cuando es año de Mundial y el calendario de competencias se pone más apretado. En el caso del Super Rugby, se juega de corrido durante 21 semanas y, hasta ahora, Jaguares tuvo apenas dos semanas sin partidos. El plantel captó esta dinámica y le respondió con creces. Un caso testigo es el de Sebastián Cancelliere. El wing apenas había participado en dos de los primeros ocho partidos porque estaba tapado por Ramiro Moyano o Bautista Delguy, pero encontró su hueco por las lesiones y jugó cinco de los últimos siete. Ante Sharks fue una de las figuras, con dos tries.
«Sabíamos que íbamos a rotar. Algunos más y otros menos, pero todos tuvieron su oportunidad y eso está bueno para darles descanso a los que vienen jugando más minutos. Nos da muchas posibilidades y es una mejor competencia», destacó Cancelliere, el back formado en Hindú.
No era la mejor temporada para Emiliano Boffelli. El exDuendes había sido el tryman de Jaguares en 2018 con 10 conquistas, pero una lesión muscular le impidió empezar la temporada a la par de sus compañeros. Su vuelta fue en bajo rendimiento, sin tries en nueve partidos. El sábado se despachó con un doblete y fue ovacionado por las más de 15.000 personas que se acercaron al José Amalfitani. «El que entra, responde. Eso habla muy bien tanto del staff como de los jugadores que les dan la confianza», afirmó.
El primer lugar de la conferencia le aseguró a Jaguares la condición de local para los cuartos de final. Sin embargo, el partido ante Sunwolves, el peor equipo del torneo, adquiere una relevancia inédita. De derrotar a los japoneses, el próximo viernes desde las 19.10, en Vélez, quedará segundo en la tabla general. Eso significa que podría jugar en casa unas hipotéticas semifinales y recién se cruzaría en la final con Crusaders, el bicampeón reinante. Actualmente, suma 46 puntos y le saca tres a su inmediato perseguidor: Brumbies.
Quesada ya dejó entrever que mantendrá la rotación. De paso, le dejó un mensaje a los 23 que elija: «Está clarísimo en mi cabeza que a los jugadores que les toque ingresar se juegan un puesto en los cuartos de final». Dicen que equipo que gana no se toca. Quesada y sus Jaguares se ríen de esa frase.
(Fuente: La Nación)