#NiUnPibeMenosPorlaDroga: Una movida que no para de crecer
Ayer martes, nos visitó en la provincia Victoria Giambruno, de la Juventud Comunista Revolucionaria Nacional. Quien nos charló y conto sobre la movida nacional #NIUNPIBEMENOSPORLADROGA.
En todo el país la lucha contra las adicciones es cada vez es más intensa, en un contexto atravesado por la marginalidad y la delincuencia. Hace tiempo comenzó el trabajo en los distintos barrios y villas del país, donde jóvenes, madres, vecinos, profesores bajo la consigna “Ni Un Pibe Menos por la Droga”, día a día intentan brindar herramientas de prevención y generar una red de contención para quienes buscan una mejor calidad de vida.
En el marco de la campaña nacional, que vienen impulsando organizaciones sociales, políticas y religiosas desde el año pasado. Ha crecido exponencialmente el consumo de sustancias psicoactivas y donde más duro golpea es donde más duele: en los millones de jóvenes excluidos del sistema educativo, laboral y sin posibilidades de acceder a la cultura, el deporte y la recreación. A los jóvenes y niños que les han arrebatado el futuro y los sueños.
La declaración de la emergencia nacional en adicciones es en primer lugar un reconocimiento a la gravedad y extensión del problema, que es fruto de la lucha de cientos de organizaciones sociales, madres y grupos de trabajo que la vienen peleando en el territorio desde hace tiempo y han logrado ponerlo en la agenda política.
Los jóvenes y la sociedad en si, buscan entre si darse una mano contra este gobierno que solo llego para profundizar sus problemáticas sociales, culturales y de consumo. Es por eso que en los distintos barrios del país esta movida no deja de crecer, donde los jóvenes deciden tomar la posta y deciden brindarles a los demás pibes la asistencia cultural y deportiva que el estado les niega.
Está claro que los jóvenes de las diferentes zonas y barrios del país, se ven cada vez más sumergidos en la pobreza, el consumo y la delincuencia. Parece ser un destino que les que les da este gobierno que ante, esa cruel injusticia responde con gatillo fácil, baja de la edad de imputabilidad, pobreza, desocupación, marginalidad y mano dura.
El amortigüe y la organización por parte de los movimientos sociales a los sectores populares más amplios del país, son de suma importancia para hacerle frente a estas situaciones. Los pibes no son peligrosos, están en peligro, en manos de un gobierno antipopular, de derecha, hambreador y empobrecedor.