Visita a genocidas y arrepentimientos: Lourdes Arrieta, «Desde el Ejecutivo me pidieron que me callara»
La diputada de La Libertad Avanza habló con Jorge Rial en Argenzuela sobre la denuncia que decidió hacer «por la búsqueda de la verdad».
Lourdes Arrieta, una de las diputadas de La Libertad Avanza criticada por la visita a los represores detenidos, quien luego afirmó no saber de quiénes se trataban porque nació en 1993, posó este miércoles en el Congreso con un ejemplar el libro Nunca Más, el informe final de Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas.
Lourdes Arrieta fue una de las diputadas de La Libertad Avanza que asistió el pasado 11 de julio al penal de Ezeiza en una supuesta «visita humanitaria» a los genocidas de la última dictadura militar, donde se encontraba Alfredo Astiz.
En este sentido, la legisladora indicó que «el diputado Beltrán Benedit» le habló de un sacerdote de apellido Olivera Ravassi que «siempre decía que eran presos políticos, que no tenían condena, hasta que desencadenó todo en lo que ellos llaman una visita
humanitaria, pero nunca dijeron que eran represores, sino presos políticos, nadie me advirtió y no reconocí a Astiz».
«Se nos dieron las garantías de que era una visita institucional, oficial, es decir… una comitiva de diputados de la Nación que iban al penal de Ezeiza, fuimos en una combi oficial», detalló Arrieta. Seguidamente, contó una particularidad respecto de Alfredo Astiz: «Me llamó la atención que me dijo ‘yo sabía que ibas a venir’, me sentí un poco incómoda en ese sentido. También me dijo que me seguía, no me sacaba la vista de encima», lanzó.
Tras señalar que «aparentemente hubo dos visitas», la diputada libertaria indicó que hizo la denuncia «por la búsqueda de la verdad y porque nunca se me dijo que íbamos a ver a Astiz».
«Yo propuse que no nos sacáramos ninguna foto por el respeto institucional y por respeto al lugar en sí. Cuando llegamos intuía que nos iban a revisar, no pasó nada y al final dijeron ‘che, saquémonos una foto’. Había quien estaba avalando esa fotografía ahí», manifestó, al mismo tiempo que sostuvo que «pasaron un sobre con el proyecto» para la liberación de los represores.
El arrepentimiento de Arrieta por la visita a genocidas
«Soy consciente, me avergüenzo y me arrepiento de haber confiado en los colegas que me dijeron que no pasaba nada, fue en mi inexperiencia, dado que el fenómeno Milei nos arrastró a todos», sostuvo la diputada de La Libertad Avanza.
«Fue mi error confiar en la palabra del presidente del bloque Gabriel Bornoroni porque él dio el aval para esta visita, estaban todos al tanto, porque la invitación estaba hecha en el grupo de WhatsApp de los diputados del bloque», indicó.
Seguidamente, se defendió al respecto de lo sucedido: «Necesitaba hablar porque mi cara estaba en todos los medios y me relacionaban con genocidas. Me esforcé mucho para llegar a este lugar y no tengo más interés que servir a la Patria».
«No hablés», fue la frase que llegó desde el Ejecutivo a la legisladora, según su testimonio. No obstante, eligió hablar y pedir perdón: «Quiero pedir disculpas por aquellos que se sienten ofendidos, esa foto me causa repulsión», en relación a la imagen de la visita a represores.
«Era mi reputación o la de ellos, ojalá nunca más pasen estas cosas y tengamos una Argentina democrática», concluyó.