Rumbo al Pacto de Mayo, cómo funciona el ajedrez de Milei y los gobernadores
El Gobierno de Javier Milei convocará para el próximo viernes a todos los gobernadores a la Casa Rosada para avanzar en la firma de un preacuerdo de políticas de Estado, para discutir el paquete de reformas que se enviará al Congreso y un posible pacto fiscal.Así lo informaron el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y los ministros de Economía, Luis “Toto” Caputo, y del Interior, Guillermo Francos, quienes se reunieron este lunes por la tarde en Balcarce 50 para analizar las condiciones de la invitación anunciada días atrás por el propio Milei.
La posición de los gobernadores
No todos los gobernadores son lo mismo.
Algunos líderes provinciales se manifestaron en contra, algunos a favor y otros están definiendo la postura que tendrán ante la invitación del presidente de reunirse en Córdoba el 25 de Mayo y firmar el Pacto de Mayo, aunque en principio la mayoría estarían dispuestos a ir a la Casa Rosada a escuchar lo que tengan para decir Posse, Caputo y Francos.
Podríamos mirar el mapa de la Argentina y entenderlo en relación con los alineamientos de los gobernadores con el gobierno nacional, que no tienen que ver sólo con simpatía política, sino también con el nivel de restricción que tiene cada gobernador en su provincia.
Los que están “ahorcados” tienden a acordar. Los que están “muy ahorcados” a lo mejor hacen lo contrario, dicen “incendio todo y rompo el puente”, como hizo hace 15 días, por ejemplo, el gobernador de Chubut, Ignacio Torres.Hay distintos factores que pueden producir o inducir la conducta de un gobernador.
Tenemos gobernadores que por afinidad ideológica y pertenencia partidaria están del lado del gobierno: Corrientes, Gustavo Valdés (radical); Entre Ríos, Rogelio Frigerio; Maximiliano Pullaro en Santa Fe; Alfredo Cornejo en Mendoza, que dijo “es música para nuestros oídos lo que escuchamos del presidente en el Congreso”. También hay otra razón: en todas estas provincias, Milei tiene a la gente.
Es el elector el que le dice a su gobernador “alineate”. Y los gobernadores olfatean que si no están bien con el presidente se van a poner en contra al propio electorado.
Hay otro grupo que, por las mismas razones están en contra del presidente. La Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, referente de Cristina Fernández; el gobernador de La Pampa, Sergio Ziliotto, que dijo “ese pacto yo no lo firmo”; el gobernador de La Rioja, que es un hombre que había dicho “renuncio si gana Milei”; y el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, que es probablemente el alfil, la pieza más importante que tiene Cristina Kirchner en el mapa federal, a tal punto que el senado peronista lo maneja José Mayans.
Después tenemos las provincias clave para desbalancear la paridad, que son las que van para un lado o para el otro como Chubut; Río Negro; Córdoba; y luego lentamente está desplazándose Santiago del Estero; Catamarca; Jujuy; y Salta.
Aún faltan algunas provincias que no han hecho eco de los dichos del presidente en su último discurso, y no se sabe de qué lado del tablero se ubicarán. Orrego en San Juan de manera discreta se ubica a favor del pacto de Mayo aunque aún nada esta escrito y asegurado.
Resta esperar el primer encuentro tablero de ajedrez camino al Pacto de Mayo y como se moverán cada uno de ellos. Habrá jaque mate?