Denunció a sus padres por violencia
En un juicio abreviado, los progenitores de la adolescente reconocieron los delitos y aceptaron la pena de prisión condicional.
Un curioso caso se presentó en la justicia sanjuanina, después de que una adolescente denunciara a sus padres por violencia física y, tras la intervención de las autoridades, los progenitores fueron condenados a un año de prisión condicional luego de aceptar la comisión de los delitos que el endilgaban.
Por lesiones leves agravadas por el vínculo, la madre de la menor fue penada, al igual que lo fue el padre de la denunciante por lesiones leves agravadas por el vínculo y amenazas agravadas. En el marco de un juicio abreviado, sus defensas acordaron el castigo con fiscalía y se comprometieron a cumplir la prohibición de acercamiento a su hija, por el término de 2 años.
“No doy más porque mis padres me pegan continuamente”, confesó la adolescente de 16 años en la dirección de su escuela y a partir de ese momento, con el apoyo de las docentes de la institución educativa, radicó la denuncia en el CAVIG.
La investigación que iniciaron los fiscales contó con los elementos de prueba para formalizar la acusación y, en esa misma audiencia, los imputados admitieron los ilícitos y fueron sentenciados, aunque por la naturaleza de la pena permanecerán en libertad.
Entre las pruebas que los funcionarios del Ministerio Público reunieron se encuentran los mensajes que el padre de la menor le envió, que reviste un alto grado de agresividad. “No importa iré 5 o 6 años preso y después me van a largar por la edad, pero te prometo que si paso algo que vos hiciste yo vengo, te agarro con el martillo grande, te quiebro toda, las piernas las manos”, le aseguró el padre a la jovencita.
A los directivos de su escuela como así también a los investigadores, la adolescente le manifestó que desde que era chica vivía bajo el sometimiento de sus padres; incluso llegó a mostrar las fotos de sus lesiones que guardaba en su celular.
Con su crudo testimonio y los elementos probatorios, fiscalía apuntó a los progenitores que resolvieron evitar llegar a juicio y, por tanto, obtener una pena más elevada y cerrar la historia con un abreviado.
Fuente: tiempo de san juan