Movimientos sociales amenazan con “escrachar” a empresas de alimentos para que congelen los precios
Movimientos sociales aliados del Gobierno resolvieron en asamblea «salir a escrachar» a empresas formadoras de precios para que congelen el valor de los alimentos que llegan a los supermercados y almacenes de proximidad. Las primeras firmas son Arcor y Molinos. Las acciones podrían comenzar a partir del miércoles.
La medida no es bien vista en la gobernación a cargo de Axel Kicillof, sobre todo, por la proximidad de los comicios del 14 de noviembre. Manifestaciones de organizaciones oficialistas contra empresas pueden tener un efecto contrario al buscado, y ser utilizadas por la oposición política.
“Vamos a salir a escrachar con fuerza a las oficinas de las grandes empresas productoras de alimentos para manifestarnos en contra de la especulación que hacen con los precios”, le explicó a Infobae uno de los principales dirigentes de la UTEP, presente en el encuentro.
-¿Y qué medidas van a tomar?
-Vamos a salir un grupo importante de compañeros y compañeras con carteles a manifestarnos frente a las oficinas de Arcor y Molinos para decirles que paren de aumentar los precios de los alimentos. Llámelo manifestación, escrache. Le vamos a decir “basta a la especulación”.
Por primera vez desde que Alberto Fernández llegó a la Casa Rosada e incluyó a las organizaciones sociales afines al Frente de Todos en el Gobierno, hay disidencia en la toma de decisión sobre una medida que los impulsores suponen que es favorable al oficialismo.
Tres de esas organizaciones no saldrán, al menos por ahora, a manifestarse contra las empresas. Una iniciativa que, según pudo saber este medio, fue muy bien tomada, por ejemplo, entre los funcionarios del gobernador bonaerense. Uno de sus más estrechos colaboradores le dijo a Infobae: “Los escarches nunca son buenas alternativas”. Frase escueta pero concisa y que expresa la idea del mandatario provincial.
Los que sí lo harán son el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), que lidera Juan Grabois. El Movimiento Popular La Dignidad (MPD), comandado por su secretario general, Rafael Klejzer, director de la Secretaría de Economía Social; y el Frente Popular Darío Santillán (FPDS) en su vertiente liderada por Dina Sánchez.
Si bien se debatió en la asamblea, la propuesta surgió desde el espacio de Klejzer quien se lo comentó, antes del encuentro del jueves, a una referente del MTE. Según pudo reconstruir Infobae, la idea fue la alternativa ante la negativa de la mayoría de las organizaciones sociales, y un grupo de intendentes, a no salir a fiscalizar los comercios de los barrios ya que es una medida en la que iban a quedar expuestos los militantes de esas corrientes vinculadas al Frente de Todos, tal como ya informó este medio.
Las primeras firmas en la mira de los escraches son Arcor y Molinos. Las acciones podrían comenzar a partir del miércoles
Lo explicaron con estas palabras: “No podemos exponer a los compañeros y compañeras a que confronten con los empleados o dueños de los almacenes. Eso va a generar tensión y hasta violencia, va a haber quilombo, y no queremos eso”.
Fue después de ese análisis que una parte de los delegados propuso que, de todos modos, había que hacer algo para exponer, no a los comercios de proximidad, sino con las empresas de alimentos como fideos, harina, aceite, tomates en conservas, polenta y galletitas, entre otros rubros.
Así fue como apareció la propuesta de los cuestionados “escraches”. Esteban “Gringo” Castro, el secretario general de la UTEP, y un dirigente que no suele participar de medidas como estas, se expresó a favor y la impulsó con fuerza. “Algo hay que hacer, sí, salgamos”, apoyó.
En desacuerdo o utilizando la fórmula de “lo vamos a discutir con nuestros compañeros y compañeras”, se expresaron tres de las corrientes de fuerte peso dentro de la UTEP y que son: el Movimiento Evita, que tiene a dos referentes que integran el gobierno nacional, Emilio Pérsico, el influyente secretario de Economía Social; y Fernando “Chino” Navarro, secretario de Relaciones Políticas y Parlamentarias.
“Nosotros no estamos de acuerdo con los escraches. Tampoco en exponer a los compañeros controlando precios en los comercios de proximidad. Otra cosa son las grandes cadenas”, expuso uno de los referentes de ese espacio.
“Nosotros no estamos en eso de los escraches”, se diferenció también uno de los integrantes de Somos Barrios de Pie. La organización está coordinada a nivel nacional por Daniel Menéndez, también funcionario. Es el subsecretario de Promoción de la Economía Social y Desarrollo Local y candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires en las elecciones del 14 de noviembre.
Cientos de militantes de ambos movimientos recorren los barrios populares del conurbano para llevar la propuesta del Frente de Todos a quienes no fueron a votar en las PASO para tratar que lo hagan. Aspiran a dar vuelta la pésima elección del 12 de septiembre, al menos en la provincia de Buenos Aires.
La Corriente Clasista y Combativa (CCC), encabezada por el diputado nacional Juan Carlos Alderete, tampoco saldrá a “escrachar” empresas. “Es una metodología que no utilizamos”, dijeron, y entienden que para “que el país salga adelante hay que generar empleo genuino y reactivar la economía”.
La disidencia en las medida que adoptó un sector de la UTEP, demuestra que no todos opinan igual, pero que esos desencuentros son parte de la dinámica de las discusiones internas.
Casualidad o no, las tres “orgas” que se mostraron a favor de los “escraches” están más referenciadas en el “cristinismo” que en el “albertismo”. A la inversa los que no saldrán a manifestarse frente a las empresas.
El mismo día que los referentes de la UTEP debatían si salían o no a controlar precios y escrachar empresas, el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti se reunía en La Plata con el gobernador Axel Kicillof y un grupo de intendentes del Frente de Todos. Les solicitaba su colaboración para controlar el cumplimiento de la resolución 1050/2021 publicada en el Boletín Oficial que retrotrae al 1 de octubre, y congela hasta el 7 de enero próximo, los precios de unos 1500 alimentos y bebidas de consumo masivo en todo el territorio nacional.)
El funcionario nacional recibió el respaldo unánime de los presentes. “Nuestra propuesta es trabajar junto a los municipios en materia de controles, ya que estamos observando un crecimiento muy acelerado de los precios que lleva a que, si bien las y los argentinos están mejorando sus ingresos, terminan consumiendo lo mismo”, aseguró Kicillof al finalizar el encuentro que se desarrolló en el Salón Dorado de la Gobernación.
Por el momento, ni los funcionarios cercanos al presidente Fernández, ni del mandatario provincial se manifestarán en público sobre los “escraches” que están organizando algunos de los movimientos sociales que integran la UTEP. Aspiran, según le dijeron a este medio, a que la idea se diluya antes del miércoles, día previsto para las primeras acciones.
Fuente: Infobae