El miércoles reabren los casinos en San Juan
A partir del miércoles 1 de julio, reabren las puertas los casinos provinciales, siguiendo una riguroso protocolo. Tanto empleados como clientes deberán cumplir con una serie de normas para prevenir posibles contagios de coronavirus.
El delegado del Sindicato de Trabajadores de Juegos de Azar (Aleara), Andrés Mercado, explicó que ya recibieron todas las normativas que se deberán de cumplir de manera estricta:
Se permitirá un máximo de ocupación de hasta 10 clientes en la sala, sin importar la superficie total del salón en cuestión, por ende no se necesitara demasiado personal para prestar servicio y se lo hará con personal reducido.
Este medida se aplicará en todas las salas habilitadas en San Juan que son 6 en total: el Casino ubicado en el Hotel Del Bono, las salas de bingo de calle General Acha en el centro, la sala de calle Mendoza y Mitre, el casino de Avenida Benavídez en Chimbas, la sala de Rawson y la de Caucete.
Todas las salas funcionarán en horarios reducidos. De domingo a jueves abrirán de 10 a 20 horas, y los viernes y sábados abrirán de 10 a 00 horas. Por ahora está permitido el ingreso de 10 personas a cada sala. Todas ellas serán supervisadas por un empleado del local y deberán respetar la distancia social de dos metros.
Los clientes y empleados del casino deberán usar barbijo, mantener distancia social y se deberán higienizar de manera regular con alcohol en gel. Además se colocarán alfombras con líquidos desinfectantes en los ingresos(agua con lavandina o agua con alcohol).
Otras de las medidas a tener en cuenta para evitar una posible propagación del virus es que los empleados controlarán la temperatura a los clientes (no deberán superar los 37,5 grados).
En cuanto a cómo se jugará, se estableció que los juegos de mesa permanecerán cerrados y los clientes sólo podrán utilizar los tragamonedas. Los empleados tendrán que estar al pendiente de cada apostador y, en caso de que cambie de máquina, deberán inhabilitar la anterior para poder higienizar el lugar.
Otro de los cambios es que quedará cerrada la barra, es decir que los clientes no podrán comprar bebidas para consumir en el salón.