LA GRAVE SITUACIÓN DEL BARRIO PADRE CARLOS MÚGICA DE RETIRO
Con más de 900 casos confirmados y en aumento y el fallecimiento de 5 personas (entre ellas los referentes barriales Ramona Medina y Víctor Giracoy) el barrio padre Carlos Múgica de retiro (ex villa 31 y 31 bis) trágicamente se convirtió en el centro de la epidemia en el país. Le sigue de cerca la 1/11/14 en el barrio de flores y el resto de los barrios populares de la ciudad donde ya empezaron a conocerse algunos casos.
El hacinamiento que se vive, varias familias compartiendo las mismas casas, el mismo angosto pasillo o el mismo baño, con poca ventilación y luz son condiciones muy favorables para que el virus no se detenga en su contagio. También el mosquito del dengue encuentra un terreno más que propicio.
Los problemas de infraestructura en los servicios esenciales como se viene padeciendo en las últimas semanas con la falta de agua, agravan la situación.
A esto hay que sumarle las condiciones de salud de la población donde existen muchos factores de riesgo relacionados a problemas crónicos, hipertensión, diabetes, como venimos relevando con el trabajo de los promotores de Salud de la CCC.
Es por esto que, ante la acertada medida del Gobierno nacional del aislamiento frente a la pandemia, hubo una rápida reacción de los vecinos y vecinas que se expresó en la conformación de un Comité de crisis del barrio junto a la parroquia Cristo Obrero.
El Comité de crisis se conformó con 63 comedores y merenderos de los aproximadamente 90 que hay en el barrio.
Desde el primer momento se puso como prioridad que se reconozca a los 42 espacios comunitarios que no reciben ninguna asistencia del Gobierno de la Ciudad. Ante el agravamiento de la situación muchos comedores asistidos diariamente por el Ministerio de desarrollo humano y hábitat dejaron de funcionar por miedo al contagio.
En este contexto se vienen realizando todos los sábados jornadas de ollas populares. Y se logró que a través de la secretaria de integración social y urbana, la encargada de la urbanización del Barrio, se haga un relevamiento de los comedores no asistidos y les llegue mercadería y elementos de higiene.
Los comedores vienen jugando un rol clave en esta emergencia sanitaria como organizadores de los vecinos y vecinas ante la necesidad pero también y fundamentalmente a la hora de informar y concienciar sobre la medidas de prevención, uso del barbijo y distanciamiento físico.
Se ve en las calles y los pasillos mucha menos circulación de gente a pesar de la dificultad objetiva para quedarse en casa. Es por eso y por el trabajo de las organizaciones sociales y el comité de crisis que no vienen teniendo eco algunos sectores del barrio que reclaman más presencia policial y más medidas represivas para obligar a realizar la cuarentena.
Las respuestas del Gobierno de la Ciudad vienen siendo muy tardías y van muy por detrás de la situación. Cuando se trata de las necesidades de los sectores populares escatiman recursos pero no así a la hora de hacer negociados o de comprar balas de goma.
Es por esto que se escuchó fuerte el ruidoso del Comité de crisis en el barrio reclamando por medidas urgentes.
Ante el avance de los casos el Ministerio de salud de la nación lanzó el operativo detectar junto al Gobierno de la Ciudad y el comité de crisis. Se empezaron a realizar más testeo y a contactar a todas las personas que tuvieron contactos estrechos con los casos positivos. En esto el comité y las organizaciones vienen realizando un gran trabajo como reconocieron las autoridades tanto de nación como de ciudad.
Ante el miedo y la gran preocupación crece la bronca por el ritmo del contagio que ya se cobró 4 vidas y por una situación que esta fuera de control.
FUENTE: NOTICIAS POPULARES