Los trabajadores del vestido entre la salud y la economía

La crisis sanitaria provocada por el COVID 19, y las medidas que con buenas intenciones ha tomado el presidente Alberto Fernández para mitigarla, van profundizando, al extenderse en el tiempo el aislamiento social obligatorio, la recesión económica producto del párate en diferentes actividades, servicios e industrias.

El sector textil y del vestido es uno de los sectores más afectados por este párate ya que no fue declarado esencial en su momento. Las fábricas pararon, los locales de venta de ropa, telas etc, cerraron y esto provocó que el sector quede muy golpeado. Según un informe de Cammesa (La Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico) que estableció una relación entre la caída del consumo eléctrico y la caída de la producción en nuestro país, el sector textil es uno de los que más ha reducido su consumo eléctrico. La baja del consumo eléctrico en este sector fue del 84% en el periodo del 19 de marzo al 29 de marzo. Esta situación es sumamente preocupante en una industria que genera cientos de miles de puestos de trabajo en todo el país y que ya venía muy golpeada por los cuatro años de gobierno neoliberal de Macri sobre todo con su política de liberar importaciones.

La situación que atravesamos los trabajadores de la industria del vestido en nuestra provincia antes de la crisis sanitaria ya era bastante mala, salarios muy bajos una media de 17 mil pesos mensuales, ritmos de producción bastante altos, un alto porcentaje de trabajadores que no reciben aportes ni son registrados, etc. Pero después del COVID 19 la situación se ha tornado más complicada aun.

Hay empresas que todavía no han pagado salarios adeudados de marzo y las patronales argumentan que el problema ha sido el cierre de los bancos, ya que no se han podido realizar operaciones atreves de cheques. Este es un problema grave ya que un trabajador que no cobra su salario, tampoco puede hacer ningún tipo de changas por el aislamiento social obligatorio y mucho menos acceder a algún programa social por estar en relación de dependencia.

En relación a esta problemática el gobierno nacional lanzó una serie de créditos para las Pymes, así estas podían entre otras cosas pagar salarios que incluyen montos de hasta 150 mil pesos por trabajador a tasa 0, pero dada las circunstancias de falta de demanda o comercialización de bienes es difícil que muchas Pymes las tomen. Otro problema es la informalidad hay empresas del sector en la provincia que tienen más de la mitad de su personal sin registrar, es difícil que puedan pedir un crédito y de esta situación los más afectados son los trabajadores.

Esta semana muchas empresas anunciaron la vuelta al trabajo a sus trabajadores. Llama la atención de que antes de que se anuncien medidas para “flexibilizar” el aislamiento social y sin que el rubro del vestido sea considerado esencial las patronales hayan decidido reabrir muchas empresas.
En relación a como se está trabajando en distintas fabricas hay diferentes metodologías, los grupos de riesgo por enfermedad no deben asistir al trabajo, los horarios se han flexibilizado por ejemplo de 8hs a 15hs para intentar no pasar demasiado frío, se trata de que las maquinas estén los más distanciadas posibles, etc.

Se les ha pedido a los trabajadores que lleven elementos de higiene y también su comida, ya que las empresas tercerizadas que realizan estos servicios en la mayoría de las fábricas no están trabajando.
Incluso algunas empresas han pensado en reconvertir su producción a elementos necesarios para la sanidad como barbijos, mamelucos, etc. Para poder sobrellevar esta situación. Otras han definido sacar la mayor cantidad de producción posible y parar en mayo cundo se espera el pico más alto del virus.

Es una situación sumamente compleja la que atravesamos los trabajadores del sector así como el resto de los trabajadores, entendemos que es momento de unidad con el resto de los sectores que están generando lazos solidarios, como las organizaciones sociales, clubes, uniones vecinales, etc. Porque el pueblo debe ser protagonista para enfrentar esta crisis y por supuesto poner siempre por delante las necesidades de los trabajadores que hoy somos los más afectados y debemos ser por ende a quienes más esfuerzos se destine para que nuestra situación mejore, preservando nuestra salud y también nuestro sustento diario y el de nuestras familias.

Agrupación de trabajadores del vestido
Adherida a la CCC