EL RECLAMO DOCENTE ES JUSTO

La paritaria nacional docente que fue abierta nuevamente por decisión política del presidente Alberto Fernández, ha generado un profundo debate en la docencia argentina. Primero es necesario poner en valor esta decisión ya que resulta imprescindible una instancia nacional de discusión de las políticas educativas, de las condiciones laborales y salariales que ataquen las desigualdades que existen entre las diferentes provincias de nuestro país.

Ahora bien, teniendo en cuenta la propuesta que fue diseñada por el ministro de educación de la nación Nicolás Trotta de elevar el salario mínimo a 23 mil pesos hasta junio (aumento que rondaría el13%) es necesario analizar como cayo esta propuesta en la masa docente. Un sector importante de los docentes votó y tienen gran expectativa en el gobierno de Fernández, esa expectativa se fortaleció con los anuncios que primeramente hizo el ministro de educación de que el salario inicial de los docentes debía estar por encima de los 30 mil pesos. Pero del anuncio de 30 mil a lo real que fueron 23 mil pesos hay mucha diferencia y generó malestar en la masa docente en general y desilusión a muchos de los sectores que tenían gran expectativa por el cambio de gobierno. Esto ha quedado demostrado en el inicio de clases donde pese a que la CTERA (Federación docente nacional con mayor cantidad de afiliados) acepto la propuesta salarial con poca discusión, solo comenzaron las clases en 13 provincias y en muchas como en San Juan si bien los gremios docentes (que a pesar de rechazar la propuesta salarial) no convocaron a ninguna medida de fuerza, los docentes se auto convocaron y surgió una movilización de más de 1000 docentes.

La propuesta en nuestra provincia fue más que insuficiente, ya que somos la provincia peor paga como lo indica un informe de CTERA publicado la semana pasada en el diario clarín el salario inicial en San Juan es de 17 mil pesos. El gobierno de la provincia pretende empatar con la paritaria nacional y estirarlo a 23 mil que con los descuentos queda en el bolsillo cerca de 20 mil, un salario de pobreza. En este punto empiezan a surgir los debates sobre la paritaria nacional y la representatividad de los sindicatos y federaciones. Sobre la paritaria nacional que fue eliminada por el gobierno de Macri (en el marco de su política achicar derechos a los trabajadores) la discusión era en las provincias principalmente si la paritaria nacional imponía un piso para iniciar la discusión salarial o imponía un techo. En la práctica en nuestra provincia impuso un techo, pero tenemos que decir que distinto hubiese sido si la propuesta se acercaba a los 30 mil ya que no es lo mismo un techo de 23mil pesos a uno de 30mil que podría ayudar más en la discusión entre la masa docente sobre la importancia de la paritaria nacional. El otro punto es la dirección sindical que acepta una propuesta escuchando poco a las bases, más preocupada en la defensa del gobierno que en la del salario docente y sin la combatividad mostrada durante los cuatro años del gobierno de Macri.

El eje de la discusión y su peligrosidad pasa justamente sobre quien va a dirigir a esta masa docente disconforme en todo el país. Vemos como mayoritariamente esta masa comienza a tomar posiciones anti gremiales, formas auto convocadas que repudian la organización gremial y a sus dirigentes e incluso posiciones antipopulares fogoneadas por la derecha. Acá la importancia de tener posiciones claras y no esconderlas, sabemos que el principal responsable de la enorme crisis que atraviesa nuestro país es Mauricio Macri y los sectores que lo apoyaron, endeudando al país de manera calamitosa, destruyendo el empleo, las Pymes, llevando a la pobreza a casi el 40% de la población,4 etc. Pero también es cierto que el gobierno de Fernández se ha dejado condicionar demasiado por la negociación con el FMI, y todos los acuerdos salariales jubilaciones, etc están supeditado a la renegociación de la deuda y esto inevitablemente genera ajuste en distintos sectores porque son las condiciones que el fondo impone para la renegociación. Distinta seria la situación si el gobierno nacional hubiera optado por mejorar los salarios, las jubilaciones y poner en el blanco a los cómplices de Macri como la cerealera Vicentin (que estafo al estado nacional con 300 millones) y patear la negociación con el fondo y los bonistas hasta resolver primero la “deuda interna” consolidando el apoyo popular a su gobierno.

En ese sentido es que advertimos la peligrosidad de que el movimiento docente no tenga una clara dirección, porque en las escuelas la discusión comienza a tornarse complicada en relación al blanco a golpear. Desde Causa Docente venimos denunciando el desastre de Macri, pero también marcamos con firmeza que tanto el acuerdo paritario nacional como el provincial son de pobreza para los docentes. Escuchamos en las escuelas opiniones que nos alarman como por ejemplo que se está ajustando a los docentes para mantener a los vagos planeros que no trabajan, fomentando el odio hacia los compañeros desocupados que cada vez son más en nuestro país y que lamentablemente solo pueden subsistir gracias a ese programa social. Otros compañeros docentes en tono de broma, pero desilusionados expresaban “volve Macri te perdonamos”. Pero estas opiniones y otras peores van a ser caldo de cultivo en una masa desilusionada y sin dirección política sindical clara. Por eso CTERA debería haber tomado una postura de mayor presión en esta paritaria nacional y conducir el reclamo docente que es justo hacia posiciones de carácter popular que pongan el blanco en el FMI y en las clases dominantes de nuestro país y exigir un mejor acuerdo al gobierno nacional para estimular la confianza de la masa docente y no dejarla sin dirección regalándosela a la derecha. Lo mismo cabe para las agrupaciones clasistas de docentes, hay que discutir con firmeza y no tener miedo a marcar nuestras posiciones, no especular sobre como la lucha docente pueda afectar la imagen del gobierno nacional, ya que con una línea acertada sobre el blanco de la lucha se puede llegar a buen puerto y hacer reflexionar al gobierno nacional y los provinciales que ganaron por el frente de TODOS sobre la necesidad de que los docentes deben cobrar salarios que estén por encima del índice de pobreza que hoy es de 38 mil pesos en nuestro país. Si los clasistas y nuestras agrupaciones no nos ponemos a la cabeza de este reclamo le daremos paso a la derecha, a las posiciones anti gremiales y abonaremos el camino para que los docentes rompan definitivamente con el gobierno nacional y pasen a defender ideas muy peligrosas para nuestro pueblo, en vez de abrazar las posiciones del campo popular.

Debemos estar a la altura de las circunstancias y discutir en nuestros sindicatos la necesidad de salarios dignos, el fortalecimiento de la organización gremial y su democracia directa, el fortalecimiento de los cuerpos de delegados y la consulta permanente a las base, con una dirección clara que ponga el blanco en los que generan la situación de crisis que vive nuestro país y exigiendo al gobierno nacional que ponga el blanco en ellos y apure el paso en medidas que resuelvan los salarios de pobreza de la docencia y que el FMI y los bonistas esperen, que primero hay que resolver la deuda interna en nuestro país.

Agrupación Causa Docente