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Los privados estiman que la inflación de noviembre rondó el 4%

La semana que viene, dos días después del cambio de Gobierno, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) dará a conocer el dato inflación correspondiente a noviembre. En tanto, mediciones privadas estiman que la misma se ubicó por encima de 3,7%, lo que marcaría una aceleración respecto a octubre, cuando el alza de los precios fue de 3,3%, según el dato oficial.


De acuerdo con la medición de Elypsis, la inflación del mes pasado cerró en 4%. “La cifra es alta, pero está por debajo de lo que estimábamos a principio del mes (4,5%). Esto ocurrió por la estabilidad del dólar, tanto del oficial como del paralelo, la menor incertidumbre y los ajustes preventivos de precios, que si bien estuvieron ocurriendo, no se expandieron y fueron menos intensos de lo que sugerían las subas de las primeras dos semanas de noviembre”, explicó a El Economista Victoria Giarrizzo, directora ejecutiva de Elypsis.


Los servicios tuvieron un ajuste hacia arriba muy fuerte en rubros como educación y salud, y algo menos en recreaciòn y cultura, mientras que en bienes, indumentaria lideró los aumentos del mes, seguido por alimentos y bebidas”, detalló Giarrizzo, quien para diciembre estima una inflación de 4,5%, aunque aclara que deberán ir observando cómo responden los formadores de precios a las primeras medidas que se anuncien y la confianza que logre recrear el próximo Gobierno. En tanto, para el próximo estiman que la inflación será de 54,4%.


Por su parte, desde la consultora Ecolatina estiman que la inflación de noviembre fue de 3,7%, traccionada en gran medida por el rubro de alimentos, que lo observaron por encima de 4,5%. “Entendemos que el aumento en alimentos puede llegar a tener que ver con algún tipo de medida precautoria por parte de las empresas, adelantándose a algún pacto social o algo por el estilo”, señaló el director de esta consultora, Federico Moll, en diálogo con El Economista.


“Parece razonable que el aumento haya venido por ahí, dado que el tipo de cambio no mostró movimientos muy significativos y los aumentos existieron, porque nominalmente los salarios están creciendo a una velocidad un poco más alta de 40% anual. Eso ya le pone un piso a la inflación, pero tanto como para que la inflación en los alimentos haya sido tan alta”, afirmó el especialista.


Hacia adelante, Ecolatina observa una desaceleración muy leve. Para diciembre, esperan una inflación de alrededor de 3,5% mensual. De esta manera, 2019 cerraría con una suba de precios de 53%, aproximadamente. “Obviamente, es un mal número, pero no creemos que vaya a ser un número raro a partir de ahora: por lo menos pensando para el próximo año, vemos un escenario de inflación más cercana a 50%. O sea, no veríamos una desaceleración muy significativa el año que viene”, anticipó Moll.


“Habrá que ver qué pasa con las paritarias y salarios, que determinan en buena medida la inflación, y qué pasa con el tipo de cambio, especialmente el oficial, que es el que sirve de guía para los precios”, comentó el directivo, al tiempo que señaló que la fuerte inflación prevista para 2020 “no sería tan mala noticia para el próximo Gobierno, teniendo en cuenta que entre más brusca sea la desaceleración mayor, será el crecimiento del gasto social por la fórmula de indexación. Por lo cual para el Gobierno podría ser un alivio que no lo obligue a pasar por una reforma previsional en el camino”.

Gran Buenos Aires


Según la consultora Orlando J. Ferreres, el Gran Buenos Aires (GBA) registró en noviembre una inflación de 4,6% mensual, lo que marca una variación de 52,1% en términos interanuales. De esta manera, el índice de precios acumula un crecimiento de 48,6% en los once meses transcurridos del año. En tanto, la inflación núcleo fue de 4,1% mensual, marcando una suba interanual de 50,2%.


Lo estimado por Ferreres para ese distrito se asemeja al resultado de la medición de “IPC Online Bahía Blanca”, que en su relevamiento para esa ciudad del sur de la provincia de Buenos Aires, registró durante el mes pasado una inflación de 4,76% respecto a octubre, cuando el rubro de alimentos y bebidas “se mantuvo especialmente activo todas las semanas, totalizando un aumento de 5,47%” en esta categoría.


El salario real cayó 3% en septiembre


Según informó ayer el Indec, en septiembre el índice de salarios creció 3% respecto al mes anterior y aumentó 44,5% respecto al mismo mes del año pasado. De acuerdo con el organismo estadístico, el resultado del noveno mes del año se dio “como consecuencia del incremento de 2,6% del sector privado registrado y un aumento de 3,6% del sector público”.


La consultora LCG señaló que el desempeño de septiembre, teniendo en cuenta la inflación, representó una caída de 3% mensual en términos reales, en tanto que en la comparación interanual la pérdida del poder adquisitivo fue de 7,6% y en 2019 acumuló una contracción de 5,7%.


“La marcada caída de los salarios reales en septiembre responde a la fuerte aceleración inflacionaria de ese mes, cuando se trasladó la mayor parte de la devaluación post-PASO a precios”, explicó la consultora en un informe, en donde afirma que el desempeño de septiembre fue la mayor pérdida salarial que se evidenció en el año en términos mensuales. Según el análisis, durante los meses siguientes de 2019 los salarios “se seguirán resintiendo de la mano de aumentos en distintos servicios de uso generalizado, como la telefonía, la nafta y la salud”. Sin embargo, señala, en la medida que los meses del próximo año vayan mostrando “una recomposición de la actividad, los salarios se irán recuperando de la mano de una (marginal) desaceleración inflacionaria”.

FUENTE

FUENTE: EL ECONOMISTA