En 2020 estará disponible la mitad de agua de un año promedio
Todos los ríos mendocinos tuvieron el peor año hídrico de varias décadas. El más crítico, el río Tunuyán tendrá el 6% por debajo del peor registro de los últimos 65 años. Según el pronóstico del Departamento General de Irrigación, entre este mes y septiembre del 2020 habrá un 11% menos de agua y estará disponible la mitad de agua de la que hay en un año promedio.
«En el informe que hacemos parte de la cantidad de nieve que tenemos, para saber la cantidad de agua que tendremos, que será del 11% menos en promedio en todos los ríos. Ese pronóstico nos permite pensar cómo vamos a embalsar y también cómo repartirla en el consumo humano que siempre es fijo y luego al resto de las actividades, entre las que el agro se lleva el 90% del agua», explicó el superintendente de Irrigación, Sergio Marinelli.
El ejemplo de lo que ocurre en el río Tunuyán es una muestra de lo que se reedita en el resto de las cuencas. Este río que tiene una gran superficie para riego, tuvo en la temporada 2018/2019 el peor registro hídrico de los últimos 65 años y para el 2019/2020 tendrá aún el 6% menos.
El titular de Irrigación detalló también el comportamiento de la escasez hídrica en los distintos ríos de la provincia.
«La escasez hídrica se calcula cuando la cantidad de agua disponible en los ríos es menor que la media histórica. En el caso del río Mendoza, por ejemplo, la cantidad de este año está por debajo en el 60% de la media histórica», precisó el funcionario.
Cómo impacta el derroche en las casas
Según contó Marinelli, para abastecer el consumo humano de agua de la provincia, el sistema hídrico destina una cantidad fija, aunque el incremento poblacional se ha notado en un mayor pedido sobre todo de Luján y Maipú.
«A eso hay que sumarle las roturas y el derroche. El cálculo actual es que hay 40% de eficiencia del sistema. No es que el 60% se deba todo al derroche, en eso impacta también la pérdida por rotura de caños e instalaciones. Es decir, hay un alta ineficiencia del sistema y una conducta que no es la adecuada», asumió el funcionario.
Para concientizar en el uso domiciliario del agua, Marinelli propuso modificar la tarifa «para lo cual hay que medir. Nosotros estamos planteando un plan de sequía que es el que presentó el gobernador Cornejo, que sea una política de Estado, que suponga los consensos políticos necesarios, pero la Legislatura no lo trató. Lo que planteamos es hacer cada vez más eficiente el riego del agro, y en el uso público, hay que ir a la medición, entonces cada uno tiene una cantidad de uso para el mes, quien se excede en el segundo tramo es más caro y en un tercer tramo se encarece aún más, entonces cuando a alguien se le rompe una cañería, corre a arreglarla».
(FUENTE;DIARIO UNO)