28 años después, la CTA se reincorpora a la CGT
En el día de hoy y desde las 16:00, la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) que responde al diputado nacional Hugo Yasky va a iniciar un proceso de retorno “histórico” hacia la Confederación General del Trabajo (CGT) conducida por Héctor Daer y Carlos Acuña.
En el marco del Congreso Anual Ordinario de la central y según lo comunicado por el propio Yasky, durante la jornada se van a votar tres mociones: incorporar la CTA a la CGT; avanzar hacia la refundación del contrato social en la Argentina y votar el apoyo a la fórmula de Alberto y Cristina de cara a las elecciones generales.
Pero por fuera de los formalismos, lo concreto es que con el candidato a Presidente por el Frente de Todos sentado en primera fila, la CTA va a oficializar su reincorporación a la CGT, 28 años después de su salida.
El proceso de salida de la Central comenzó a gestarse en el año 1989 cuando el sector denominado «los Gordos» (agrupado en la corriente interna Movimiento Sindical Menem Presidente -MSMP-) sostuvo un crecimiento en su peso político y logró el desplazamiento del por entonces secretario general de la CGT, Saúl Ubaldini, llano opositor a la gestión menemista.
Este hecho tuvo que ver con un período desde el cual, si bien las políticas implementadas durante el gobierno de Carlos Menem fueron a contramano de los intereses de los trabajadores, los sindicatos optaron por una actitud pasiva donde los acuerdos extrainstitucionales favorecieron la buena relación entre las partes.
Una vez concretada esta división y en sus 28 años de tránsito paralelo, la CTA tuvo dos secretarios generales. El primero de ellos fue Víctor De Gennaro, sucedido por Hugo Yasky, hoy referente del espacio.
Pero dentro de la CTA también existieron rupturas. El alineamiento que el propio Yasky sostuvo con los 12 años de administración kirchnerista llevó a una nueva fractura al interior de la central, con la creación de la CTA Autónoma, hoy bajo la conducción de Pablo Micheli, como resultado.
Entonces, si bien la «resistencia» al gobierno de Mauricio Macri es un denominador común entre Yasky y Micheli, al momento, solo el sector mayoritario que responde al actual diputado nacional es el que va a formalizar su retorno a la CGT.
“Estamos de acuerdo con la unidad pero no con amontonar, no nos convence que Daer fuera el que quede bien parado y termine conduciendo este proceso de unificación”, marcó Micheli en las últimas horas.
El anuncio de la unificación de la CTA en la CGT es determinante en tanto, considerando la victoria de Fernández como algo dado, significa el punto de partida de un proceso que buscará la unidad de acción a favor del proyecto político que representa el Frente de Todos.
Esto último tiene una importancia mayúscula en un país excepcional en términos sindicales como es la Argentina donde además de la representatividad legislativa, el poder de movilización y el peso político de los sindicatos es mayúscula.
Según la Organización Internacional de Trabajo, con más de 3 millones de afiliados, el país cuenta con una tasa de sindicalización del 40,3%, altamente superior a otros casos de la región como pueden ser Uruguay (30,1%), Chile (14,4%) o Brasil (16,6%).
(Fuente: Filo.news)