El Tribunal Supremo avala la exhumación de Franco y enviar sus restos a El Pardo
El Tribunal Supremo ha avalado la exhumación de Francisco Franco del Valle de los Caídos y ha rechazado que sus restos sean trasladados a La Almudena, tal y como solicitaba la familia. De esta manera, el cuerpo podrá ser enterrado en el cementerio de Mingorrubio, en El Pardo, excepto si la familia plantee otro lugar alternativo.
Los seis magistrados de la Sala de lo Contencioso Administrativo que han estudiado los recursos de la familia y de la Abogacía del Estado han resuelto por unanimidad avalar la decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de sacar del Valle de los Caídos a Francisco Franco en base a la aplicación de la ley de Memoria Histórica.
El tribunal cree que la decisión del Ejecutivo, aprobada por Real Decreto, está dentro de los límites de esta ley y por tanto no hay nada que impida su aplicación
El alto tribunal considera que la decisión del Ejecutivo, aprobada por Real Decreto, está dentro de los límites de esta ley y por tanto considera que no hay nada que impida su aplicación. Además, rechaza que los restos sean enviados a la catedral de La Almudena (Madrid), tal y como solicitaba la familia. La Abogacía del Estado presentó un informe de la Delegación del Gobierno que lo desaconsejaba por los problemas de seguridad que podría conllevar que el cuerpo del dictador estuviera en pleno centro de Madrid.
Según explican fuentes jurídicas, los seis magistrados han dado por bueno el borrador de sentencia redactado por el ponente Pablo de Lucas, que avalaba la decisión del Gobierno. En el texto no se resuelve que los restos de Franco sean enterrados en El Pardo pero sí rechaza la pretensión de la familia. El Ejecutivo ya anunció que pretende que los restos se reinhumen en el cementerio de El Pardo-Mingorrubio y alude a motivos de seguridad para oponerse al deseo de los nietos del dictador de hacerlo en la cripta de la catedral de la Almudena, donde su hija, Carmen Franco, compró en 1987 una sepultura a perpetuidad con espacio para varios cuerpos.
En el fallo no se resuelve que los restos de Franco sean enterrados en El Pardo, pero sí rechaza la pretensión de la familia
Ahora la familia puede recurrir ante el Tribunal Constitucional al considerar que el Decreto Ley vulneró el “derecho fundamental a la libertad religiosa”, del “derecho al honor, a la intimidad personal y familia y a la propia imagen”, así como denunciar que se trata “de una ley de caso único” y de los propios requerimientos para que el Gobierno pueda “dictar un Decreto Ley”.
El Gobierno tiene luz verde para activar la reinhumación en el cementerio de El Pardo-Mingorrubio y, tras conocer la decisión, desde el Ejecutivo se han vanagloriado por ello y han asegurado que tratarán de hacer efectiva la decisión cuanto antes, a poder ser antes de la repetición electoral del próximo 10-N.
El Gobierno quiere hacer efectiva la decisión antes de las elecciones
En declaraciones a la Cadena Ser, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo se ha alegrado de la decisión del Supremo, ha remarcado que se trata de una “cosa juzgada” y que, por tanto, la decisión del Supremo es firme en su ejecución a pesar de que la familia puede recurrir la decisión todavía mediante un recurso de revisión ante el Supremo, el Tribunal Constitucional y los tribunales europeos.
Calvo ha evitado poner una fecha concreta para llevar a cabo la exhumación y la inhumación de los restos, pero ha expresado su deseo de que “esto no esté en un foco que no quería este Gobierno”. La vicepresidenta ha remarcado que son “un gobierno cumplidor de las normas”, que han hecho “un trabajo jurídico muy importante” y que “lo importante era llegar a un final bueno”, que no es otro que “los españoles no tengamos a un dictador en un lugar en el que se pueda enaltecer”.
La familia Franco prevé “agotar todos los recursos”
Por su parte, el abogado de los Franco, Luis Felipe Utrera-Molina, ha comentado la sentencia del Supremo para considerarla como “una profunda decepción” y que van a “agotar todos los recursos” posibles para revertirla. El letrado ha lamentado que la familia nunca tuvo oportunidad de elegir porque el Gobierno nunca quiso negociar con la familia del dictador
Aunque ha venido a decir que entre sus siete clientes había alguna voz proclive a favorecer la exhumación de su abuelo, el abogado lo ha reducido a un debate interno y ha remarcado que todas las decisiones de la familia se han tomado por unanimidad. Además, ha lamentado que los restos puedan acabar en el cementerio de Mingorrubio porque se trata de un emplazamiento de titularidad estatal, lo cual coloca a la familia en situación de indefensión ante el hecho de que cualquier otro gobierno decidiera remover de nuevo los restos. “El Pardo no es de mis clientes, es del Estado” y lo que se quería era que “nadie pueda tocar los restos nunca más por razones políticas”.
(Fuente: LaVanguardia)