El Gobierno bajó las indemnizaciones por accidentes de trabajo
El presidente Mauricio Macri modificó por decreto el cálculo base para el pago de intereses en las indemnizaciones por accidentes de trabajo. El decreto 669, publicado esta mañana en el Boletín Oficial, quita a la tasa de interés del Banco Nación como valor de referencia para el ajuste del monto de indeminización y lo reemplaza por la tasa de variación de las Remuneraciones Imponibles Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE).
El Gobierno argumenta su decisión en los desequilibrios macroeconómicos que generaron sus políticas para apuntar que las altas tasas de interés «han llevado a desnaturalizar los derechos de los trabajadores beneficiarios del sistema».
La decisión del Gobierno se conoce a menos de una semana del accidente ocurrido en el Aeropuerto de Ezeiza, donde murió un obrero y la Justicia investiga irregularidades de las empresas y los controlantes.
«El ajuste de las obligaciones de las aseguradoras mediante la aplicación de tasas financieras ha llevado a desnaturalizar los derechos de los trabajadores beneficiarios del sistema», indica el decreto firmado por Macri y subraya que busca la «sostenibilidad del Sistema de Riesgos del Trabajo».
«Me llama la atención que Macri baje las indemnizaciones laborales poco después de la muerte de un trabajador por la política de inaugurar obras», apuntó el titular de la CTA de los argentinos, Hugo Yasky, y calificó la decisión como «una aberración». En diálogo con El Destape radio, el dirigente gremial advirtió que «las centrales tendremos que tomar medidas».
El decreto presidencial modifica el artículo 12 de la Ley de Contrato de trabajo y, en particular, su punto 2, donde se especifica cuál será el valor de referencia para calcular los intereses entre la denuncia del trabajador y el reconocimiento de su indemnización por «determinación de la incapacidad laboral definitiva, deceso del trabajador u homologación».
Hasta hoy —«las modificaciones dispuestas en la presente norma se aplicarán en todos los casos, independientemente de la fecha de la primera manifestación invalidante», detalla el decreto—, el interés era calculado sobre la tasa activa a 30 días del Banco Nación.
Sin embargo, el decreto menciona que se apoya en «los recientes acontecimientos económico-financieros» para avanzar en la modificación del cálculo y precisa que con la política de tasas de interés actual del Banco Central «el rendimiento financiero de los activos de la industria aseguradora es del orden del 42% promedio, mientras que la tasa de interés vigente para las indemnizaciones por contingencias previstas en la Ley 24.557 asciende a niveles cercanos al 90%».
«El referido desequilibrio sistémico, el ajuste de las obligaciones de las Aseguradoras mediante la aplicación de tasas financieras ha llevado a desnaturalizar los derechos de los trabajadores beneficiarios del sistema», considera el decreto presidencial en pos de imponer las «garantías técnicas que permitan actuar ante un posible deterioro de la situación patrimonial de las Aseguradoras».
Sobre el impacto que el actual cálculo tiene sobre las indemnizaciones de los trabajadores, el Gobierno consideró que «generan rendimientos financieros disociados del daño a reparar y ajenas al propósito que inspira la norma».
Con esos argumentos, el decreto borra la tasa del Banco Nación como referencia y la remplaza por «un interés equivalente a la tasa de variación de las Remuneraciones Imponibles Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) en el período considerado».
«Si esta norma no es inconstitucional, cuando llegue el reclamo de la familia del trabajador que murió en Ezeiza se le va a aplicar esta baja en la indemnización», ejemplificó el juez laboralista Enrique Arias Gibert.
(Fuente: Página12)