El influyente diario ingles «Financial Times» anticipa un nuevo default
“El presidente (Mauricio) Macri pidió calma y diálogo con la oposición, mientras Argentina busca evitar un noveno default soberano pidiendo a sus acreedores, incluido el FMI, más tiempo para pagar 101 mil millones de dólares en deudas”, señala el diario británico, que recalcó que “el peso se desplomó y los rendimientos de los bonos se dispararon el jueves, en respuesta a la reestructuración de la deuda propuesta” por la alianza gobernante.
El periódico describe así el camino hacia el default: “En general, las principales agencias de calificación crediticia declaran el default cuando un país no cumple con todas sus obligaciones de deuda, ya sea atrasando los pagos o no haciéndolos de manera completa o incumpliéndolos totalmente”. En esa instancia, los países deudores “pueden alargar sus cronogramas de pago canjeando de manera voluntaria con los acreedores los viejos bonos por otros nuevos, de más largo plazo, endulzando el acuerdo con intereses más altos”. Aunque aclara que el intercambio “no debe ser forzado si aspira a que sea considerado verdaderamente voluntario”.
Es allí donde el Financial Times apunta con dureza a la actual adminsitración y compara a la Argentina con Grecia: “En el caso de Argentina, es probable que incluso un nuevo acuerdo voluntario en la práctica afecte negativamente a los tenedores de bonos argentinos y, por lo tanto, constituya un default: el noveno en la historia del país y el tercero desde el cambio de milenio”.
En otras palabras: «Aunque Argentina solo busca una extensión voluntaria de las fechas de vencimiento, sin una reducción de los intereses ni del capital, el hecho probablemente se verá como otro default soberano por algunas medidas”
Sobre el final de la nota, el Financial Times se refiere a la oposición y dice que “un asesor económico” de Alberto Fernández, el gran ganador de las primarias del 11 de agosto y virtual futuro presidente “expresó su preocupación de que las medidas podrían fallar para reestablecer la estabilidad económica que el gobierno está buscando, lo que podría generar pánico entre los argentinos que no pueden intercambiar inversiones por efectivo”.
(Fuente: Página 12)