Salvini ordena un censo sobre los campamentos de gitanos
Después de haber endurecido las leyes contra la llegada de inmigrantes a Italia, el ministro del Interior del país, Matteo Salvini, vuelve a concentrar sus esfuerzos en las personas de etnia gitana. El líder de la Liga ha mandado este martes una circular a los delegados de Gobierno en el país para reclamar un informe sobre la presencia de campamentos de gitanos en las próximas dos semanas.
El propósito de Salvini, según ha dicho, es tener una idea clara sobre cuántos campos de gitanos ilegales hay en el territorio italiano y dónde estan situados para poder elaborar un plan para desalojarlos. Concretamente, el ministro quiere saber la densidad y la tipología de los asentamientos, las condiciones en las que se encuentran –si tienen agua, electricidad y alcantarillado–, si han sufrido incendios, el número de menores que habitan en ellos o si hay caravanas, entre otras preguntas que ha mandado a los delegados del Gobierno.
“El objetivo es el de definir estrategias compartidas, implicando también a las asociaciones interesadas y a los interlocutores no institucionales, para que acaben con las situaciones de degradación identificadas y se restauren las condiciones de legalidad”, reza la carta del Ministerio. En el programa aprobado por la Liga y el M5E ya proponían desmantelar los campos de romaníes, donde creen que viven 40.000 personas.
No es la primera vez
El año pasado el ministro ya propuso un censo para expulsar a los que no habían nacido en el país
La Asociación 21 de Julio, que defiende los derechos de los gitanos, ya se ha mostrado “profundamente preocupada” por la circular de Salvini. La juzga “discriminatoria” contra estas comunidades, porque está directamente enfocada a las personas de etnia gitana.
No es la primera vez que Salvini propone un censo de los gitanos en Italia. El año pasado, propuso contarlos para expulsar a los que no habían nacido en el país mientras lamentaba que, “a los italianos, por desgracia, habrá que quedárselos”. La propuesta finalmente no se realizó porque la ley italiana impide registros de carácter étnico.
En Italia, un censo de este tipo trae muy malos recuerdos. Despierta el fantasma de las leyes raciales que impulsó en 1938 Benito Mussolini, que proponían crear categorías de ciudadanos y someterlos a políticas especiales sólo para ellos.
El Consejo de Europa estima que en Italia viven entre 120.000 y 180.000 personas de etnia gitana, la mayoría con nacionalidad italiana, una de las proporciones más bajas en los países europeos.
(Fuente: La Vanguardia)