El «ciclo agotado» del triunvirato
Tengo la impresión que este ciclo está agotado. Si uno está desautorizado para tomar acciones, no tiene sentido seguir”, afirmó el dirigente, que situó el punto de inflexión en el paro del 19 de diciembre pasado al que no adhirieron algunos gremios, entre ellos la Unión Tranviarios Automotor (UTA). “En diciembre, cuando la mayoría de los sindicatos grandes desobedecieron el mandato del triunvirato, ahí se entró en una crisis profunda
El triunviro de la CGT Juan Carlos Schmid consideró que el ciclo de conducción compartida de esa central obrera “está agotado” y descartó la posibilidad de que un nuevo proceso pueda ser encabezado por el líder camionero Hugo Moyano. “Los mentores de este proceso (del triunvirato) fueron Moyano, (Antonio) Caló y (Luis) Barrionuevo, y hay que hacerse cargo de los errores que se han cometido”, puntualizó en lo que fue la primera vez que uno de los miembros de esa cúpula expresa públicamente lo que era un secreto a voces.
“Tengo la impresión que este ciclo está agotado. Si uno está desautorizado para tomar acciones, no tiene sentido seguir”, afirmó el dirigente, que situó el punto de inflexión en el paro del 19 de diciembre pasado al que no adhirieron algunos gremios, entre ellos la Unión Tranviarios Automotor (UTA). “En diciembre, cuando la mayoría de los sindicatos grandes desobedecieron el mandato del triunvirato, ahí se entró en una crisis profunda”, admitió Schmid durante una entrevista por radio La Red, en la que estimó que la situación que puertas adentro vive la central obrera no se resuelve con una conducción única o compartida.
El estatuto de la CGT, explicó el triunviro, indica que quien debe estar al frente de esa columna del movimiento obrero organizado tiene que ser una sola persona. “La cuestión –planteó- es que si tomamos decisiones en el colectivo y después las desconocemos, estamos con un problema serio” que no lo va a resolver un secretario general. Por eso, “hay que barajar y dar de nuevo, y poner las barbas en remojo sobre esa situación”, recomendó.
Al respecto, descartó la posibilidad de que el quiebre que vive la CGT derive en un retorno de Hugo Moyano. “No creo que esté planteando volver a la CGT”, estimó Schmid. “Si el ciclo (del triunvirato) está terminado de esta manera –planteó-, no olvidemos que los mentores de este proceso fueron Moyano, Caló y Barrionuevo, y hay que hacerse cargo de los errores que se han cometido.”
Por otra parte, ratificó su apoyo a la marcha del próximo miércoles 21 que distintos sindicatos y las dos CTA realizarán contra las políticas da ajuste del gobierno de Cambiemos, y negó que las razones de esta protesta estén centralizadas en la embestida de la Casa Rosada contra el Camionero. “Más allá de la disputa Moyano-Macri, hay una multitud de problemas que van a ser puestos en evidencia” durante esa movilización, aseveró y remarcó que esas demandas “obedecen al deterioro económico y social que atraviesa el país”.
En este sentido, el dirigente admitió además que la relación entre la CGT y el Gobierno “ha sido de mucha tensión” en los últimos meses, sobre todo desde que Mauricio Macri lanzó las reformas previsional, laboral y tributaria. Estas iniciativas, sostuvo, implicaron “un quiebre importante” en la relación, y por eso “hoy no hay diálogo”.
“En el intento del diálogo social, el Gobierno no ha desarrollado ningún marco de confianza. Dudo muchísimo de todas sus intenciones y la reforma previsional creo que me da la razón”, fundamentó. De la misma manera, acusó al ministro de Trabajo, Jorge Triaca, de “decir una cosa y ejecutar otra”, y citó como ejemplo el encuentro que el funcionario mantuvo con miembros del Consejo Directivo de la CGT antes de las elecciones legislativas de octubre del año pasado.
“Discutió una reforma laboral sobre tres pilares: agencia de salud, blanqueo de trabajo en negro y capacitación. Pero lo que ocurrió después fue totalmente distinto”, concluyó.