Triunfo del chavismo en Venezuela
El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) consiguió hacerse con 295 de las 335 alcaldías en disputa en las municipales del domingo, informó ayer el Consejo Nacional Electoral (CNE) en su página web. Los partidos de Henrique Capriles (Primero Justicia), Leopoldo López (Voluntad Popular) y Henry Ramos Allup (Acción Democrática) decidieron no participar en estos comicios, aunque sí lo hicieron formaciones opositoras más pequeñas.
La victoria oficialista podría ser mayor y superar las 300 alcaldías ya que faltan por totalizar los resultados de 11 municipios en estados donde el chavismo se ganó el resto de las alcaldías en juego, como en Bolívar (sur) o Barinas (oeste).
Los seguidores del fallecido expresidente Hugo Chávez (1999-2013) pintaron de rojo, el color con el que se relaciona a su movimiento, 11 de los 23 estados del país y vencieron de nuevo en la joya de la corona, el Distrito Capital, con su candidata Erika Farías.
En los otros cuatro municipios en los que está dividida la Gran Caracas, otro fue para el PSUV y los tres restantes para opositores que se presentaron de forma independiente por la retirada de tres de los cuatro grandes partidos por desconfianza con el CNE.
Tras el PSUV la formación que consiguió los mejores resultados fueron los opositores socialcristianos de COPEI, con 13 alcaldías, entre las que se encuentra las única capital retenida por los antichavistas, la occidental San Cristóbal, en el estado Táchira.
Un Nuevo Tiempo, el único de los grandes partidos que sí se presentó, consiguió 7 burgomaestres, entre ellos el del acomodado barrio de Chacao, en Caracas.
Otros partidos como Patria Para Todos y el Partido Comunista de Venezuela consiguieron dos alcaldes en municipios donde no fueron de la mano con el PSUV.
Independientes por el Progreso, con dos alcaldes y Mira Nueva Esparta, Por Amar al Pueblo, Movimiento al Socialismo, Con Enzo y Progresista Merideños Independientes consiguieron cada uno un alcalde.
Además de estas casi 300 alcaldías el PSUV ganó la gobernación del estado Zulia, donde se llamó de nuevo a elecciones después de que el vencedor en los comicios del 15 de octubre, el opositor Juan Pablo Guanipa, se negara a juramentarse ante la Asamblea Nacional Constituyente, órgano integrado solo por chavistas y señalado de fraudulento por la oposición.