Crece la pobreza
Cambiemos cumplió dos años en el Gobierno sin logros en su principal promesa de campaña: «Pobreza cero». Según el Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA) de la UCA, son 13,5 millones los argentinos que viven en la pobreza y 2,5 millones los indigentes en el último trimestre de este año. El número surge a partir de una nueva metodología de medición y análisis, por lo que algunas pequeñas bajas porcentuales, no significan una baja en la cantidad de personas que no alcanzan a cubrir sus necesidades. Además, el informe precisa que entre los pobres, el 48,4 por ciento son niños; y que la porción más rica de la población se queda con 18 veces más de dinero que los más pobres.
El adelanto del informe de la ODSA para el último trimestre de 2017 vuelve a ubicar a un tercio de la población argentina (31,4 por ciento) en situación de pobreza. La cifra es levemente menor al 32, 9 por ciento registrado en el último trimestre de 2016, pero por la nueva base de muestra —se pasó a utilizar como base de datos el censo 2010, hasta ahora se usaba el de 2001— representa a mayor cantidad de personas.
El nuevo informe de la UCA no sólo mide el nivel pobreza a partir de los niveles de ingresos familiares sino que le suma una serie de siete valores multidimensionales, sobre la población base del censo 2010. Con esa salvedad, las cifras a fines de 2015, cuando asumió el presidente Mauricio Macri, indicaban que el nivel de pobreza registrado por la UCA se ubicaba en el 29 por ciento, lo que significó 1,5 millones más de pobres solo en el primer año de Cambiemos. En el informe de 2016, la ODSA indicó 32, 9 por ciento de pobres, lo que representaba a 13 millones de personas de bajos recursos. Así, la cifra del último trimestre de 2017, con 13,5 millones de pobres, revela un incremento de 500 mil personas pobres.
En tanto, las personas en situación de indigencia alcanzaron el 5,9 por ciento de la población argentina, lo que representa a 2,5 millones de personas. Con la diferencia de base de muestra, el registro del último trimestre de 2016 había arrojado un 6,9 por ciento de indigentes, que representaba a 2,7 millones de personas. El sector de personas que no alcanzaban a cubrir la canasta alimenticia se había incrementado en 1,6 por ciento en comparación con el último semestre de 2015, cuando Cambiemos llegó al poder. En números totales, 600 mil personas más quedaron en situación de indigencia en el primer año de gestión de Mauricio Macri. Mientras que la comparación, en números totales, entre el último semestre de 2016 y 2017, indica que solo 200 mil personas lograron salir de esa situación crítica.
Otro dato alarmante que muestra el informe del ODSA es que entre la población pobre, el 48 por ciento son niñas, niños y adolescentes, de hasta 14 años, mientras que entre la población indigente, la población de menor edad alcanza al 10 por ciento. La situación económica de las personas de menores recursos se revela más injusta al conocerse que así como un tercio de la población está en situación de pobreza e indigencia, las personas de mayor poder adquisitivo se quedan con un tercio del total de los ingresos. Mientras que los más ricos obtienen el 31,8 por ciento de los ingresos, la población más pobre se queda con el 1,7 por ciento. O sea, que la diferencia entre ambos extremos es de 18 veces.