Avanza la reunión por el pacto fizcal
A partir de las 9, los gobernadores se reúnen en la Casa Rosada hoy con los ministros Rogelio Frigerio (Interior) y Nicolás Dujovne. Es para ajustar detalles del acuerdo, que firmarán este mediodía junto con el presidente Mauricio Macri.
Las negociaciones avanzaron ayer. De las tres posturas que había entre los mandatarios provinciales (no firmar, cerrar un pacto light y negociar), primó esta última, la más amable para Mauricio Macri. El scrum díscolo, encabezado por Carlos Verna, Gildo Insfrán y Gerardo Zamora, aceptó la mesa de diálogo.
Ayer a la tarde, Frigerio y sus vices Sebastián De Luca y Alejandro Caldarelli, entraron al CFI por la puerta de calle San Martín. Al rato desembarcaron Rodrigo Pena, vice de Nicolás Dujovne y Paulino Caballero, a cargo de la relación con las provincias.
Antes del atardecer, el acuerdo que Macri quiere firmar hoy al mediodía, estaba peinado, analizado y encaminado. Al mediodía, la cumbre ardía de posiciones extremas. Pasada las 17,30, Frigerio bajó del 7 piso del CFI con más de medio «pacto» negociado con delegados de 22 provincias. Solo faltaron Buenos Aires y Capital.
El resto quedó para, previa validación de Macri, la reunión que los gobernadores mantendrán con Frigerio hoy a las 9 como escala previa a verse con el presidente para, si no asoma una tempestad, firmar el «Consenso Fiscal».
A la cumbre, el ministro llevará una propuesta adicional de Reforma Previsional. El pacto de Macri pide que las provincias apoyen la iniciativa -en criollo: que sus legisladores voten- pero estos quieren que la actualización de las jubilaciones sea por inflación más un plus.
A la vez, le pidieron que se limiten los montos de las jubilaciones de privilegio de jueces, políticos y diplomáticos.
En el transcurso de la tarde, Frigerio modificó alícuotas y progresión de Ingresos Brutos. Como contó Clarín, el tope se flexibiliza. En Comercio quedará, ad eternum, de 5%, al igual que en Telefonía. El tope para Comercio, y a partir de qué año empezaba la baja en Servicios Financieros, marcó una de los cruces más intensos.
En IIBB hubo bilaterales con las provincias que tienen Hidrocarburos que había fijado un régimen tributario que este pacto modificaba. Frigerio accedió al pedido. Para el neuquino Omar Gutiérrez, Alberto Weretilneck de Rio Negro y Pablo González, el vice de Santa Cruz, ese retoque fue clave.
La traba es qué hacer con los juicios radicados en al Corte por las provincias. Suman, contó Uñac, 340 mil millones de pesos que las provincias no quieren resignar «a cambio de nada». Miguel Lifschitz, de Santa Fe, ya le anticipó a Macri en EEUU que no renunciará a una fallo favorable de los cortesanos.
«¿Cómo que Vidal se lleva la plata que pide y no renuncia a los juicios pero nosotros renunciados a los juicios sin recibir nada a cambio?», dijo un mandatario peronista al salir del CFI.
Todo o nada, dicen en Gobierno: o renuncian todos o no renuncia nadie y siguen los juicios en la Corte. En la charla de Frigerio con los gobernados se repitió, como un mantra, la frase de «sacar la litigiosidad de la política».
La cuestión bonaerense, eco de unitarios y federales, estuvo siempre presente porque se discutían sobre fondos para Buenos Aires pero no el gobierno de Vidal no estaba sentado en la mesa. Frigerio-De Luca oficiaron de patrocinantes de la causa bonaerense.
«En hace 25 años que me dedico a temas de provincias: en todos los pactos fiscales, la Nación primereó a las provincias. Esta vez nosotros no queremos que pierdan dijo el ministro luego de escuchar a Insfrán e Schiaretti quejarse de acuerdos en los ’90 y en los 2000.
Concesiones de ambos lados, el staff oficial confirmó que se co-participará la recaudación del Revalúo Impositivo -un reclamo de los gobernadores sobre el presupuesto 2018- y que se contemplará el déficit de las cajas previsionales provinciales, un tema hipersensible para trece provincias.
Afuera, el clima pareció graficar el zigzag político: del calor sofocante del mediodía, a la tormenta pasajera y luego la calma aunque, como ocurre con la vida y la política, siempre puede haber un aguacero.